La ley del matrimonio gay supera su último trámite en la Cámara de los Lores

EFE LONDRES

INTERNACIONAL

Tras un debate meramente formal en la Cámara de los Comunes, el texto se convertirá en ley en pocos días

15 jul 2013 . Actualizado a las 22:02 h.

La ley para legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en Inglaterra y Gales ha superado el último trámite en la Cámara de los Lores británica, que la aprobó en su tercera y definitiva lectura.

Tras un debate meramente formal que tendrá lugar este martes, 16 de julio, en la Cámara de los Comunes, el texto impulsado por el Gobierno conservador británico se convertirá en ley en pocos días, una vez reciba sanción real.

No obstante, las bodas homosexuales no se celebrarán en Inglaterra y Gales (Irlanda del Norte y Escocia tienen las competencias transferidas) hasta el verano de 2014, según contempla el proyecto legislativo.

La cámara alta ya había aprobado el pasado 4 de junio el texto en su segunda lectura tras un controvertido debate que se alargó dos días y que amenazaba con devolver la ley a los Comunes a través de una enmienda que finalmente fue desestimada.

Tras superar ese escollo, el proyecto pasó después a un comité de la Cámara de los Lores para un nuevo estudio antes de ser sometido hoy por última vez al voto de los parlamentarios, que lo aprobaron por mayoría.

El texto vuelve mañana a la cámara baja británica, que deberá ratificar los cambios establecidos en la Cámara de los Lores en lo que se espera que sea un mero trámite antes de que la reina Isabel II sancione definitivamente la ley.

Su tramitación legislativa no ha estado exenta de polémica desde su paso por la Cámara de los Comunes el pasado mayo, cuando el primer ministro conservador, David Cameron, necesitó del apoyo de la oposición laborista y de los liberaldemócratas para dar luz verde al texto, rechazado por algo menos de la mitad de la bancada tory.

Al proyecto de Cameron se opuso no sólo un sector de su propio partido, sino también la Iglesia Anglicana, por lo que el legislador incluyó en el texto la prohibición expresa a que las iglesias de Inglaterra y Gales puedan celebrar bodas entre personas del mismo sexo.

Aún así, cualquier organización religiosa que quiera unir en matrimonio a personas del mismo sexo podrá hacerlo si pide autorización expresa al Gobierno británico.