Maduro y Cabello intentan mostrar unidad en el chavismo tras la acusación de conspiración

pedro garcía otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

El presentador que fue grabado mientras denunciaba como corrupto y conspirador al presidente del Parlamento, afirma ser víctima del servicio de inteligencia israelí confabulado con la oposición

22 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Mario Silva, el presentador televisivo venezolano que fue grabado mientras denunciaba como corrupto y conspirador a Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional, y afirmaba que el jefe de Estado, Nicolás Maduro, era débil y que estaba manipulado por su compañera, Cilia Flores, anunció que dejaba su programa de televisión, emblema del chavismo, alegando razones de salud.

Silva afirmó ser víctima de «un montaje del Mossad (el servicio de inteligencia israelí) confabulado con la oposición», y añadió que el audio se realizó con extractos de los nueve años en los que el programa ha estado al aire, pero luego indicó que está «a la orden de los tribunales para lo que quieran investigar».

La supuesta conversación entre Silva y Aramís Palacios, militar cubano que dirige las operaciones de Inteligencia de la Casa Militar venezolana, ha causado un terremoto en las filas del chavismo y confirmado que hay distintas facciones en el partido.

Maduro y Cabello, sin embargo, aparecieron juntos el mismo lunes en la noche en un acto con funcionarios del Gobierno portugués. El presidente del Parlamento venezolano aseguró que «el chavismo está más unido que nunca». Maduro no ha hecho comentarios sobre la grabación, y Jorge Arreaza, yerno del finado presidente y actual vicepresidente, quien aparece mencionado en el audio como jefe de otro supuesto clan de corrupción, solo afirmó que «no hay fórmula para dividir a los hijos de Chávez».