Hollande dice que dedicará este año a sacar a Europa de su letargo

mercedes lodeiro REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

François Hollande antes de la rueda de prensa de ayer en el Elíseo.
François Hollande antes de la rueda de prensa de ayer en el Elíseo. YOAN VALAT < / span>efe< / span>

Pretende tomar la iniciativa para mejorar su imagen ante los franceses

17 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Tras el último latigazo que le han propinado las encuestas sobre su popularidad, François Hollande ha cambiado su estrategia, pasando de economizar sus comparecencias tras la hiperpresidencia de Nicolas Sarkozy a protagonizar su segunda aparición televisiva de su quinquenato. Y es que las dificultades económicas (Francia entró en recesión el miércoles) y la crisis por el caso Cahuzac (el ministro del Presupuesto con cuentas en Suiza) condujeron al jefe de Estado a aumentar el ritmo de sus declaraciones, sin lograr no obstante limar el descenso de popularidad.

El presidente francés ha asegurado que su segundo año de mandato será el de «la ofensiva» y ha propuesto una iniciativa europea para instaurar «un gobierno económico europeo que se reuniría todos los meses alrededor de un presidente».

Un Gobierno de la zona euro

Tras defender la política económica y social de su primer año de presidencia, aseguró que su objetivo de aquí a diciembre es invertir la curva récord del paro en Francia y sacar a «Europa de su letargo». Todo a través de cuatro ejes: un gobierno económico de la zona euro, para armonizar la fiscalidad y luchar contra el fraude fiscal; un plan para la inserción de los jóvenes; el desarrollo de la energía renovable; y la apertura de una nueva etapa de integración con capacidad presupuestaria para la zona euro y la posibilidad de instaurar impuestos. «Si Europa no avanza, se borra del mapa», justificó.

La ofensiva contra el paro incluirá que los jóvenes que lleven unos meses sin trabajo estudien formación profesional.

A preguntas de los periodistas (acudieron unos 400), descartó un inminente cambio de Gobierno, auguró un crecimiento nulo en el 2013, y para el 2014, que se anuncia uno del 1,2 %, dijo que quiere creer en él pero que se concentra en sus objetivos. Confirmó implícitamente su intención de aumentar los años de cotización. «Como se vive más tiempo, se tendrá que trabajar un poco más de tiempo», dijo sin entrar en detalles. Rechazó que la reforma de las pensiones se la imponga la UE.

«La hago por responsabilidad» para reducir el déficit y que ese peso no recaiga en generaciones futuras, avisó.

Sobre su escasa popularidad, afirmó que su trabajo «no es ser querido, sino tomar las decisiones correctas».

Acerca de sus 60 promesas de campaña aseguró que hay otras que no estaban escritas, como el paro y la mejora de la vida de los franceses, que le preocupan. En este capítulo añadió que estaba muy interesado en la política familiar (Francia es el primer país de la UE en natalidad) y anunció la modulación de las prestaciones para que las familias más favorecidas no tengan las mismas ayudas que las otras.