El exdictador guatemalteco Efraín Ríos Montt ya está en prisión

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INTERNACIONAL

JORGE DAN LOPEZ

El militar, condenado a 80 años por genocidio y crímenes de lesa humanidad, deberá volver a la sala de vistas de la Corte Suprema de Justicia el lunes para una audiencia de reparación a las víctimas

11 may 2013 . Actualizado a las 22:06 h.

El ex dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt, condenado el viernes a 80 años de prisión por genocidio y delitos contra deberes de humanidad, amaneció este sábado por primera vez en prisión después de que el Tribunal de Sentencia revocara su arresto domiciliar, una medida que destaca la prensa local.

El exjefe de Estado de facto (1982-1983) deberá volver a la sala de vistas de la Corte Suprema de Justicia el lunes, cuando el Tribunal citó a las partes procesales para una audiencia de reparación a las víctimas solicitada por el Ministerio Público (MP) y los querellantes adhesivos.

En tanto, Ríos Montt, de 86 años, permanecerá en la prisión del Cuartel General Matamoros, un destacamento castrense ubicado en la capital.

En ese lugar existe un centro de detención que fue acondicionado para reos de alta vulnerabilidad y Ríos Montt se convirtió en el reo número 19 recluido en la instalación.

En dicha cárcel también permanece el ex presidente de Guatemala, Alfonso Portillo (2000-2004), sindicado de actos de corrupción y quien libra una batalla legal para evitar su extradición a Estados Unidos que lo requiere bajo cargos de lavado de dinero.

Rudy Esquivel, vocero del Sistema Penitenciario, explicó a periodistas que por medidas de seguridad a esa cárcel se envía a reos con un perfil altamente vulnerable.

En tanto, los diarios guatemaltecos destacaron con amplios informes y titularles la condena.

«80 años», «Culpable» y «Condena», fueron algunos de los titulares empleados por los principales rotativos.

Como parte de sus informes, los diarios incluyeron las variadas reacciones, incluyendo la de Amnistía Internacional (AI) que consideró el veredicto como «un paso histórico en la larga lucha del país por la justicia» y señaló que «con esta condena, Guatemala lidera con su ejemplo en una región con arraigada impunidad».

Los diarios también editorializaron, sin tomar postura a favor o en contra, respecto al tema. Sus llamados fueron a «privilegiar la ley y la tolerancia» y a reflexionar sobre «el imperio de la ley», o simplemente a reconocer que fue «una sentencia sin precedentes».

«A nuestro juicio, resulta necesario insistir en que esta sentencia constituye la primera etapa del proceso más famoso de la historia nacional. Los abogados defensores anunciaron recursos legales ante la Corte de Constitucionalidad, en cuyas manos queda la decisión definitiva, que confirme o cambie la sentencia. Se debe insistir en que las pasiones no deben desbordarse y se conviertan en violencia, que tanto daño ha hecho al país», dijo el matutino Prensa Libre.