Condenado el primer ministro egipcio a un año de cárcel por desacato

Efe

INTERNACIONAL

Qandil ha sido procesado por incumplir por no actorar una orden judicial que le obligaba a devolver al Estado una propiedad privatizada

17 abr 2013 . Actualizado a las 17:43 h.

Un tribunal penal cairota condenó hoy al primer ministro egipcio, Hisham Qandil, a un año de cárcel y a la suspensión de su trabajo por no acatar una orden de una corte.

Qandil ha sido procesado por incumplir una resolución de un tribunal administrativo, que le obligaba a devolver al Estado una propiedad estatal privatizada por su Ejecutivo. El Tribunal Penal de Doki, cuyo fallo se puede apelar, obliga también al primer ministro al pago de una fianza de 2.000 libras egipcias (unos 285 dólares).

Según una orden emitida anteriormente por un tribunal administrativo, Qandil tenía que devolver la propiedad de la fábrica de lino de Tanta, al norte de El Cairo, al Estado después de haberla privatizado. Esta orden exigía a Qandil que las condiciones de trabajo de los empleados de esa compañía vuelvan a ser las mismas que antes de la privatización.

La actuación del Ejecutivo de Qandil, que lleva en el cargo desde julio pasado, ha suscitado las críticas de la oposición, que consideran que sus políticas obedecen los dictados del presidente egipcio, el islamista Mohamed Mursi, y de los Hermanos Musulmanes.