Ramón Guillermo Aveledo: «Nuestro adversario no es Nicolás Maduro, es el Estado venezolano»

Julio A. Fariñas REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Asegura que la campaña electoral será más desigual que la de octubre

29 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Ramón Guillermo Aveledo es el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), coalición opositora que el pasado octubre respaldó la candidatura de Henrique Capriles a la presidencia de Venezuela. Entonces no lograron derrotar al fallecido presidente pero sí se consolidaron como alternativa con más de 6,5 millones de votos.

-¿Sigue siendo Chávez el rival a batir aunque el candidato del oficialismo sea Maduro?

-Es lo que el candidato oficialista quiere que creamos, lo difícil es que logre convencer a un número suficiente y, en caso de hacerlo, que eso no se vuelva contra él porque es un engaño. La muerte y las inéditas honras fúnebres del difunto presidente deben haber tenido un impacto significativo en una parte importante de nuestro pueblo. Cuánto, ya lo sabremos.

-¿En qué cambió el escenario?

-En que Maduro no es Chávez, en que este no está y en que los recursos fiscales, que siguen siendo cuantiosos, ya no son infinitos.

-Usted me dijo la última vez que le entrevisté que, con otro candidato distinto de Chávez, Capriles habría ganado. ¿Es derrotable Maduro?

-Claro que es derrotable, aunque este momento no es aquel. Hombre a hombre, el encargado no se compara con Capriles. Y sépalo, trabajamos para vencer. Nuestro adversario no es Maduro, es el Estado venezolano, cuyos recursos son usados con desparpajo a favor de un partido.

-¿Va a ser esta una campaña más, menos o igual de desigual que la anterior?

-Desigual será. Y quizás más desigual, pues la mayor debilidad relativa del liderazgo lo llevará a abusar más. Es la lucha de David contra Goliat, y ya sabemos cómo concluyó esa bíblica confrontación.

-¿Qué cambios han introducido en la estrategia de campaña?

-Más unidad en el comando de campaña, tarjeta única, y un tono de mayor confrontación directa con el candidato. Revisamos con mucha franqueza nuestra campaña y nuestra acción política ya de cuatro años y hemos hecho los ajustes.

-La campaña oficial será muy corta. ¿Eso es una ventaja o un inconveniente?

-Tiene ventajas y desventajas. Entre las primeras Capriles es más conocido y, al ser más corta, cuesta menos. Entre las segundas, la cercanía con el funeral y que la devaluación no se siente aún del todo.

-Después del siete de octubre afloraron fisuras en la oposición. ¿Están superadas o persisten?

-Superadas. Estamos unidos.

-¿Era inevitable que Capriles repitiese como candidato?

-Era el mejor.

-¿Se plantearon reservarlo para una contienda más normal?

-No. Su liderazgo se va forjando en las dificultades. Esa es su principal fuerza. También ir por la gobernación de Miranda en diciembre era arriesgado, pero el resultado dio la razón.

-¿Se puede decir que Chávez dejó a Venezuela en la bancarrota?

-La dejó muy empobrecida, endeudada y dividida. Nuestra tarea será hacerla próspera y unirla.

-¿El factor emocional puede ser determinante el día 14?

-Veremos cuál es su peso real y a favor de quién juega. Está por ver si el candidato del chavismo puede ser un heredero convincente y confiable.

-Si se repitiesen los resultados del 7-O, ¿queda chavismo para rato?

-Depende. El liderazgo carismático tiene su propia lógica y en Venezuela, también el rentismo, que es la adicción de nuestra política y nuestra sociedad.

-¿Qué futuro le augura al oficialismo tras el 14A? ¿Seguirá con el esquema de partido único?

-Su vocación es el partido único. No lo ha logrado. No lo logrará.