La investidura de Obama, una celebración con sabor latino

DPA

INTERNACIONAL

Cantidad de estrellas, personajes e invitados hispanos, comunidad clave en la reelección del presidente estadounidense, participarán en las celebraciones

18 ene 2013 . Actualizado a las 17:53 h.

Con la cantidad de estrellas, personajes e invitados hispanos a las ceremonias de investidura de Obama, al presidente estadounidense que este lunes renovará mandato solo le falta jurar el cargo en español. Y es que casi todas las celebraciones que comenzarán este fin de semana y culminarán el lunes con la jura pública ante el Capitolio tienen algún que otro tinte latino.

Para empezar, uno de los miembros del comité organizador de todos los actos es nada más y nada menos la actriz Eva Longoria, una declarada seguidora del presidente Barack Obama que ya participó activamente en su campaña electoral el año pasado. Otra de las latinas que más enorgullecen a la creciente comunidad hispanoparlante del país -clave en la reelección de Obama el pasado noviembre- es Sonia Sotomayor, quien en el primer mandato del demócrata se convirtió en la primera hispana en llegar a la Corte Suprema. La magistrada de origen puertorriqueño, en boga estos días de nuevo por haber publicado sus memorias, será la encargada de tomar el juramento del vicepresidente Joe Biden.

Con el visto bueno personal de Obama, el poeta Richard Blanco subirá también a ese podio el lunes para hacer más historia: como el primer latino -es hijo de cubanos nacido en España pero educado en Estados Unidos- y como el primer homosexual, además de ser el poeta más joven, que es invitado a recitar el «poema de investidura» ante los ojos de todo el país. «La escritura de Richard es maravillosamente adecuada para una inauguración que celebrará la fuerza del pueblo estadounidense y la gran diversidad de nuestra nación», dijo de Blanco el propio Obama.

Inmediatamente después otro cubano, el reverendo Luis León, será el encargado de otra pieza clave de la ceremonia: la bendición que empieza a cerrar los las celebraciones, selladas posteriormente por la cantante Beyoncé, que entonará el himno nacional. León, oriundo de Guantánamo, es un pastor episcopal cuya iglesia está muy cerca de la Casa Blanca. El religioso llegó a Estados Unidos en 1961 como parte de la operación Peter Pan por la que miles de niños cubanos fueron enviados a Estados Unidos por temor a la revolución que Fidel Castro acababa de iniciar en la isla.

El experto religioso -ya realizó la bendición durante la investidura de George W. Bush en el 2005- fue elegido en sustitución del reverendo Loui Giglio, cuyo nombramiento provocó las protestas de la comunidad homosexual por un discurso antigay que pronunció en los años 90. La iglesia de León, frecuentada a menudo por los Obama los últimos cuatro años, es conocida, sin embargo, por ser abierta a la comunidad homosexual, destacó The Huffington Post recientemente.

En un discreto segundo plano en ese escenario frente al Capitolio, pero no por ello menos relevante, estará el lunes otra latina: la inmigrante Lily Griego, una madre soltera de Colorado. Al igual que otros siete estadounidenses de todo el país, Griego ha sido nombrada «copresidenta ciudadana» de la investidura de Obama, por lo que participará tanto en el gran acto como en otras celebraciones previas desde el sábado. Pero los guiños latinos no acaban aquí.

La comunidad celebrará la reelección del presidente al que ayudó a mantenerse en la Casa Blanca -el 71 % de los hispanos votaron por Obama en el 2012, un respaldo clave para su victoria- con una fiesta propia por todo lo alto la noche del domingo en el Kennedy Center, el principal teatro de la capital. Organizada también por Eva Longoria, durante algo más de una hora en la gala Latino Inaugural 2013 desfilarán estrellas como Marc Anthony, Chita Rivera, Rosario Dawson, Mario López, Robert Rodríguez, Wilmer Valderrama, George López, el popular alcalde de San Antonio, Texas, Julián Castro, o la pareja de actores Antonio Banderas y Melanie Griffith, según el programa adelantado. «Los latinos desempeñaron un papel clave en las elecciones y ayudaron a inclinar la balanza de la victoria del presidente Obama», recordó Longoria al anunciar la gala. «Pero no vamos a esperar otros cuatro años para tener un impacto en el futuro de nuestro país, así que el Latino Inaugural 2013 abrirá el camino para la participación cívica de los latinos a corto plazo», agregó.

Y es que tras cuatro años de espera vana los latinos están decididos a recordarle a Obama que su apoyo no es totalmente gratuito: esperan que el presidente demócrata cumpla de una vez su promesa de impulsar una reforma migratoria, tema crucial para una comunidad en la que la mayor parte de sus miembros conoce a un inmigrante indocumentado. Obama ha prometido en repetidas ocasiones que se pondrá a ello «poco después» de la investidura en la que tanto latino lo rodeará, aunque la apremiante negociación pendiente por el techo de la deuda con los republicanos y su recién lanzada iniciativa para un mayor control de las armas amenazan con empujar la reforma migratoria en el calendario una vez más.