El líder de Hezbolá amenaza a EE.UU. por el vídeo de Mahoma

Redacción / La Voz

INTERNACIONAL

Las protestas se radicalizan en Asia y reúnen a miles de personas en Beirut

18 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Cualquier esperanza de una rebaja de la intensidad de las protestas antiestadounidenses por el vídeo de Mahoma se desvaneció ayer tras el estallido de nuevas manifestaciones en Oriente Medio y Asia. La más multitudinaria fue convocada en el Líbano por el líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, que instó a sus seguidores a no permanecer en silencio y advirtió a EE.UU. de las «repercusiones peligrosas» si se difunde la película completa.

En una inesperada e inusual aparición, Nasralá se unió durante unos 20 minutos a la protesta en Beirut que congregó a decenas de miles de personas en Dahia, un suburbio de la capital que controla este grupo chií, según informa Efe. Es su quinta aparición en público desde que permanece escondido desde la guerra contra Israel del 2006,. «Nuestra furia no va a ser pasajera, es el nacimiento de un movimiento que debe continuar en toda la umma (nación musulmana)», subrayó el jeque

Jaleado por sus fieles, el jeque instó a suspender la difusión del vídeo ofensivo con el profeta en Internet y castigar a sus productores. «EE.UU. tiene que comprender que si publica la película entera habrá repercusiones peligrosas en todo el mundo», advirtió, ya que por el momento solo se ha difundido un tráiler de 14 minutos. Los manifestantes portaron pancartas con el lema «EE.UU. es el diablo», así como enseñas sirias y fotografías Bachar al Asad, del que el grupo chií es un firme aliado.

Las protestas se radicalizaron en Afganistán Pakistán, Indonesia y la India. Al menos una persona murió y dos fueron heridas por disparos de la policía en la aldea pakistaní de Warai, en la frontera con Afganistán, y se quemaron coches en Karachi.

La tensión se acentuó también en Kabul. Unos mil manifestantes se echaron a las calles y se enfrentaron a las fuerzas de seguridad, disparándoles y lanzándoles piedras, además de quemar coches. Medio centenar de policías resultaron heridos.

En Indonesia, la policía disparó gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a cientos de manifestantes que se congregaron frente a la Embajada de EE.UU. en Yakarta. Un grupo separatista de la Cachemira india pidió que se expulsen a los embajadores americanos hasta que el director del vídeo sea arrestado. En Azerbaiyán, una treintena de personas fueron detenidas cuando intentaban celebrar una protesta frente a la embajada estadounidense, y en Yemen, cientos de universitario exigieron la expulsión del embajador de EE.UU.