Sus apoyos en la segunda vuelta pasarían de un 70 %
04 ago 2012 . Actualizado a las 00:23 h.El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), es el favorito de cara a las elecciones presidenciales de 2014, con el 69,8 por ciento de intención de voto, según una encuesta divulgada hoy por la Confederación Nacional de Transportes (CNT).
La actual presidenta brasileña, Dilma Rousseff, sería la vencedora con un 59 por ciento de los votos en caso de que las elecciones fueran hoy y en un escenario en el que no figurara Lula da Silva.
En relación a los eventuales contrincantes, el senador Aécio Neves, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), obtuvo el 11,9 por ciento de las intenciones de voto en caso de competir contra Lula, y el 14,8 por ciento en caso de hacerlo contra Rousseff.
Por su parte, el gobernador de Pernambuco, Eduardo Campos, del Partido Socialista Brasileño (PSB), obtuvo el 3,2 por ciento de las intenciones de voto en un escenario en el que se postule Lula, y un 6,5 por ciento en uno en el que compita contra Rousseff.
En una eventual segunda ronda, Lula vencería a Neves con 73,4 por ciento de los votos, y a Campos con el 76,1 por ciento.
En tanto, Rousseff vencería una hipotética segunda vuelta con 63,8 por ciento de los votos contra Neves, y 69,1 por ciento contra Campos.
De acuerdo con los datos recavados en julio pasado, la mandataria alcanzó un nivel de aprobación personal de 75,7 por ciento, lo que supone un aumento de 5,5 puntos porcentuales en relación a la alcanzada en agosto de 2011, que fue 70,2 por ciento.
Sólo el 17,3 por ciento de los 2.000 encuestados durante los días 18 y 26 de julio pasados desaprobó la actuación personal de la mandataria del Partido de los Trabajadores (PT).
En relación a la evaluación de su gobierno, el 56,6 por ciento de los encuestados lo calificaron como «positivo», el 35,5 por ciento lo calificó de «regular» y sólo el siete por ciento como «negativo».
En agosto del año pasado, el 49,2 por ciento de los entrevistados evaluó como positivo el gobierno de Rousseff, y 9,3 por ciento como negativo.
Sobre la comparación de su gobierno con el de Lula da Silva, el 48,2 por ciento de los entrevistados consideraron que son «iguales» en desempeño. Un 34,6 por ciento evaluaron que el gobierno de Rousseff es peor que el de Lula, y el 15,9 por ciento evaluaron lo contrario.
En la encuesta de agosto de 2011, el 45,4 por ciento consideraba mejor el gobierno de Lula, el 38,1 lo consideraba igual al de Rousseff, y el 11 por ciento prefería el gobierno de la mandataria.