El jefe del grupo parlamentario y la secretaria del PS entrarían en el Ejecutivo
08 may 2012 . Actualizado a las 07:00 h.François Hollande participará hoy en su primer acto oficial como presidente electo de la República. Ayer se pasó el día encerrado en su cuartel general de campaña, recibiendo llamadas y reuniéndose con los posibles integrantes de su primer Gobierno.
Todos los ojos miran a Jean-Marc Ayrault, presidente del grupo parlamentario socialista durante los últimos 15 años, fiel a Hollande y conocido por su capacidad negociadora para lograr consensos. El nombre de Martine Aubry, secretaria general del PS, no se ha caído aún de las quinielas porque la avala su experiencia como gestora.
El nuevo Ejecutivo no se hará público hasta dentro de una semana, cuando Hollande tome posesión de las riendas del país y del palacio del Elíseo. Según una de sus portavoces de campaña, será «un Gobierno de urgencia republicana».
«El programa del día es el trabajo», afirmó el flamante presidente, consciente de que se debe preparar, especialmente para sus próximas citas internacionales y el encuentro que mantendrá con la canciller Angela Merkel, inmediatamente después del traspaso de poderes fijado para el próximo martes.
Como hizo François Mitterrand con Jacques Chirac en 1995, Nicolas Sarkozy ha invitado a Hollande a la ceremonia conmemorativa del Armisticio de la Segunda Guerra Mundial, que se celebrará hoy en el Arco de Triunfo de París. Es una forma ¡ institucional de remarcar la continuidad en la jefatura del Estado francés más allá de la alternancia política. Hollande quiere salvaguardar la unidad francoalemana, pero está decidido a adjuntar un pacto de crecimiento que complemente el Tratado de Estabilidad.
Tras viajar a Berlín el día 15, ya tiene cita fijada para el 18 con Barack Obama. Mantendrán su primera entrevista justo antes del inicio de la cumbre de dos días del G-8 en Camp David. Empalmará con la cumbre de la OTAN en Chicago, donde tiene previsto anunciar oficialmente la retirada de las tropas francesas de Afganistán antes de que acabe el 2012, con un año de adelanto sobre lo previsto.
Hollande dejó claro ayer a sus colaboradores que no pueden bajar la guardia de cara a las elecciones legislativas. Considera que la hipótesis de una cohabitación sería un «factor de inestabilidad, de desorden».
El presidente electo durmió muy poco la noche del domingo al lunes. Intenta de momento hacer vida normal y sigue ocupando su apartamento en el distrito XV de París. Ayer, al salir de su domicilio, recibió las felicitaciones de la gente del barrio, que de momento no ha protestado por el ajetreo. El dispositivo de seguridad de un presidente de la República puede acabar convirtiéndolo en un vecino indeseable.