Dick Cheney, exvicepresidente de EE.?UU., se recupera de un trasplante de corazón al que fue sometido al sábado tras 20 meses en lista de espera. Cheney, de 71 años, arrastra un largo historial de problemas cardíacos. Sufrió el primero de cinco infartos a los 37 años, llevaba un marcapasos desde el 2001 y en el 2010 le implantaron un dispositivo que ayudaba a su corazón a latir. Pero él mismo reconocía hace un año que su única opción era un trasplante. Cheney fue sometido a la larga y compleja operación de trasplante en un hospital de Virginia cercano a Washington.
El que fue vicepresidente desde el 2001 hasta el 2009 es conocido por sus posturas extremas en política internacional. Apoyó firmemente la existencia de la prisión de Guantánamo y la utilización de métodos de tortura para el interrogatorio a presuntos terroristas. Desde que dejó la Casa Blanca ha sido uno de los críticos más duros con la presidencia de Barack Obama.
Cheney ha sido con frecuencia blanco de las bromas de los cómicos televisivos estadounidenses, que tampoco han dejado pasar la ocasión de hablar de su trasplante. Joan Rivers escribía en Twitter: «Muy sorprendida. Dick Cheney tiene ya corazón después de tantos años sin él».