Siria amenaza con contagiar la región

Rosa Paíno
Rosa Paíno REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

La violencia salta al Líbano y Damasco acusa a árabes y occidentales de complicidad

12 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Los primeros síntomas de que la crisis siria podría extenderse más allá de sus fronteras aparecieron ayer. Los conatos violentos en el Líbano, la llegada de armas y yihadistas iraquíes a Siria y los informes sobre la presencia de Al Qaida amenazan con contagiar una región donde las mechas están siempre prestas a prender. Y todo ocurre cuando la suní Arabia Saudí ha decidido a involucrarse aún más en el conflicto al patrocinar la resolución contra el régimen sirio, alauí y apoyado por el chií Irán, esta vez en la Asamblea General de la ONU, en donde al contrario que el Consejo de Seguridad, ningún país miembro cuenta con derecho de veto y por tanto tiene visos de salir adelante.

Riad parece haber copiado la estrategia que puso en marcha, aunque sin éxito, la Autoridad Palestina para ser miembro de pleno derecho del organismo internacional. El texto se basa en el plan árabe que exige la renuncia de Bachar al Asad y Rusia ya ha mostrado su total oposición. La Liga Árabe perfilará hoy la iniciativa saudí, al igual que la idea de crear un grupo de amigos de Siria.

El régimen de Bachar al Asad optó ayer por cargar contra países árabes y occidentales acusándolos de ser cómplices de los autores del doble atentado del viernes contra sedes de los servicios de seguridad sirios en la hasta ese día tranquila ciudad de Alepo y que dejó 28 muertos.

Asimismo, dio un plazo de 72 horas a Túnez y Libia para que cierren sus embajadas en Damasco, informó ayer a Efe una fuente oficial siria, que pidió no ser identificada. Mientras, se informaba del asesinato a tiros por «grupos terroristas» del general de brigada y médico Isa al Jawli delante de su casa.

En el vecino Líbano se volvieron a repetir los choques del viernes entre defensores y detractores al régimen de Al Asad en dos barrios de la ciudad de Trípoli, pero esta vez el enfrentamiento se saldó con al menos tres muertos y 20 heridos en Trípoli. Los choques cesaron por la tarde tras la tregua acordada entre los enfrentados clanes musulmanes, suní y alauí, informó a AFP un funcionario del área de seguridad que solicitó anonimato.

En la frontera este, en Irak, su viceministro del Interior, Adan al Asadi, informó de que sus servicios de inteligencia tenían constancia de que cierto número de yihadistas iraquíes entraron en Siria, igual que el trasiego de armas.

Mientras, el régimen seguía bombardeando Homs y Zabadani. Los activistas calculan que más de 450 personas murieron en Homs desde que el 4 de febrero comenzó la ofensiva.

La incursión de Al Qaida

La rama iraquí del grupo terrorista Al Qaida estaría detrás de dos de los recientes atentados en Damasco y probablemente también en la ciudad de Alepo, informó ayer el grupo de periódicos McClatchy citando fuentes oficiales estadounidenses. Según los funcionarios, que ofrecieron la información bajo condición de anonimato, los informes de inteligencia sobre los incidentes indican que los atentados se produjeron bajo las órdenes de Ayman al Zawahiri, el extremista egipcio que asumió el liderazgo de Al Qaida tras la muerte de Osama Bin Laden. Las fuentes agregaron que la facción iraquí de Al Qaida (AQI) comenzó a involucrarse en la revolución siria cuando Al Asad lanzó las primeras ofensivas contra civiles.