Obama empieza con el discurso de la Unión su campaña para ser reelegido

victoria toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

L. DOWNING / Reuters

Centrará su intervención en la creación de empleo y en la recuperación económica.

24 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

«Para todos y no solo para unos cuantos ricos». Ese es, en sus propias palabras, el plan que el presidente estadounidense, Barack Obama, presentará hoy en su discurso del estado de la Unión. A las 9 de la noche hora de la Costa Este (las tres de la madrugada en España), Obama hablará al país en el discurso más importante del año, una intervención que el año pasado siguieron por televisión 43 millones de estadounidenses.

Y si siempre es importante esta cita anual del presidente de EE. UU. con los ciudadanos, este año aún más, porque es electoral. El demócrata aprovechará esta noche para empezar a convencer a sus posibles votantes de que merece un segundo mandato. Pero no lo tiene fácil porque su índice de desaprobación sigue muy bajo. Una encuesta reciente fijaba la popularidad de Obama en un 43 %, una cifra mucho más baja que aquel 57 % que tenía en el 2009, cuando hizo su primer discurso del estado de la Unión.

La crisis económica, con sus altas cifras de desempleo y el aumento de la pobreza, han hecho mella en los estadounidenses, que no acaban de aprobar cómo la ha gestionado el equipo de Obama. Por eso, su discurso de esta noche, que según se ha filtrado se estará retocando hasta minutos antes de que el mandatario lo pronuncie, estará basado fundamentalmente en la recuperación económica y en la creación de empleo.

Impuestos

Obama volverá a pedir que se suban los impuestos a los más ricos e insistirá en la necesidad de disminuir las desigualdades que la crisis ha polarizado. Aunque también aprovechará para destacar sus logros en este año. El primero de ellos es, sin duda, la muerte de Bin Laden, y no hay duda de que Obama lo rentabilizará. Como tampoco la hay sobre que aprovechará para resaltar su decisión de acabar las guerras de Irak y Afganistán y la vuelta de los soldados a casa.

Y justo después del discurso y como si este hubiera sido el pistoletazo electoral de salida, Obama hará una gira de tres días que lo llevará a cinco estados.

Entretanto, mientras Obama aprovecha los recursos de estar en el cargo para impulsar su reelección a la Casa Blanca, cada uno de los republicanos que compiten en las primarias del partido intenta llegar al 6 de noviembre en las papeletas.

Gingrich, que dio un vuelco al proceso con su victoria el sábado en Carolina del Sur, está ya centrado en conseguir votos para la cita en Florida. Y ayer apareció en varias entrevistas en televisión intentado convencer de que es el único republicano capaz de ganar a Obama. «Puedo competir punto por punto con Obama en los grandes temas», decía Gingrich.

Sus dos contrincantes en Florida serán Mitt Romney y Rick Santorum, porque el libertario Ron Paul ha decidido saltarse esa cita para hacer un mayor esfuerzo en las siguientes convocatorias.