Erdogan llama a consultas a su embajador tras aprobar Francia una ley que castiga negar el genocidio armenio
23 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Turquía ha suspendido la cooperación militar y las relaciones diplomáticas con Francia, pese a ser aliados en el seno de la OTAN, y ha llamado a consultas a su embajador en París en protesta por el voto de los diputados franceses a una ley que criminaliza negar el genocidio armenio de 1915.
El texto ha sido votado a mano alzada por una mayoría del medio centenar de diputados presentes en la Asamblea. La proposición prevé un año de prisión y 45.000 euros de multa para toda negación pública de un genocidio. Francia reconoce por ley dos, la de los judíos durante la Segunda Guerra Mundial, y la de los armenios, pero hasta ahora solo penaba la negación del primero. A favor de la iniciativa han votado la mayoría de los diputados de la UMP de Nicolas Sarkozy y los socialistas.
Varios diputados abandonaron el hemiciclo para no pronunciarse. El único socialista que se ausentó fue Jean Glavay, por considerar anticonstitucional el texto, que todavía debe pasar por el Senado.
Los armenios afirman que las masacres y deportaciones entre 1915 y 1917 dejaron más de millón y medio de muertos. Turquía reconoce 500.000, pero niega la voluntad de exterminio.
El ministro armenio de Exteriores, Edouard Nalbandian, mostró la gratitud de su país, mientras que para el primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, este voto «abrirá heridas irreparables y muy graves en las relaciones bilaterales». Erdogan incluso no descarta más represalias. Habló de una política fundada en el racismo, la discriminación y la xenofobia, antes de declarar: «Revisaremos las relaciones con Francia». Estudiarán caso a caso las peticiones militares francesas de usar su espacio aéreo e impiden el uso de sus puertos a barcos galos.
Ankara cree que la nueva ley tiene tinte electoral y que con ella Sarkozy intenta conseguir para las presidenciales de abril el voto del medio millón de armenios que viven en Francia. Las rencillas entre ambos países no son nuevas. Sarkozy se opone al ingreso de Turquía en la UE.