La denuncia de una eventual asonada llega al Parlamento de Pakistán

Islamabad / EFE

INTERNACIONAL

18 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El Parlamento de Pakistán discutió ayer un nuevo desencuentro entre el poder civil y el militar por la denuncia de una posible asonada, que podría provocar la salida del embajador pakistaní en EE.UU., Husain Haqqani.

Los diputados intercambiaron reproches tras saberse que Haqqani presentó su dimisión después de hacer supuestamente de mediador para hacer llegar en secreto a EE.UU. una carta en la que el presidente, Asif Alí Zardari, pedía ayuda frente al Ejército de su país, según la revista Foreign Policy.

En esa misiva, escrita tras la muerte de Osama Bin Laden el 2 de mayo, Zardari pedía al jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., Michael Mullen, que evitase un hipotético golpe militar que lo sacase del poder. La muerte de Bin Laden puso en el disparadero a la cúpula del Ejército, algo que en su momento hizo despertar rumores de que podría maquinar un golpe de Estado.

El empresario Mansoor Ijaz reveló los detalles sobre la supuesta carta en un artículo en el diario Financial Times, aunque sin nombrar a Haqqani. Según Foreign Policy, Haqqani, conocido liberal y autor de un libro crítico con las Fuerzas Armadas, ha ofrecido su dimisión a su amigo y confidente Zardari.