Detenido el último prófugo serbio con crímenes de guerra

Snezana Stanojevic BELGRADO / EFE

INTERNACIONAL

La venta de un cuadro de Modigliani dio la pista sobre Goran Hadzic

21 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El último prófugo serbio reclamado por crímenes de guerra, Goran Hadzic, exlíder de los serbios de Croacia, fue detenido ayer, con lo que Belgrado da otro paso de acercamiento a la UE. Hadzic es el último acusado por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) que seguía en libertad tras la detención del excomandante serbobosnio Ratko Mladic.

El exlíder de los serbios de Croacia fue capturado sobre las 8.30 hora local en Krusedol, en el norteño monte Fruska Gora, a unos 80 kilómetros de Belgrado. Hadzic llevaba un documento de identidad con nombre falso, declaró a la prensa Vladimir Vukcevic, fiscal especial serbio de crímenes de guerra. Según explicó, fue difícil reconocer al acusado, ya que tenía bigote y barba de unos dos o tres días.

Hadzic era conocido por su espesa barba antes de desaparecer en el 2004 de su vivienda en Novi Sad, horas después de que el TPIY cursara a Serbia la acusación contra él con la petición de que fuese detenido. Fue capturado en un bosque cuando se reunía con un «contacto» que le entregó dinero. Esa persona también fue detenida, pero su identidad no ha sido revelada.

Hadzic iba armado con una pistola en el momento de la captura, aunque no ofreció resistencia. Vukcevic explicó que el detenido mantenía contactos con un círculo reducido de personas, entre ellos varios curas de la Iglesia ortodoxa, e indicó que seguirán las investigaciones para establecer detalles sobre sus ayudantes.

Según el fiscal, un paso crucial en la búsqueda de Hadzic fue un intento de venta de un óleo de gran valor del pintor italiano Amadeo Modigliani, destinado al apoyo financiero al prófugo. Los preparativos de venta de la pintura fueron detectados por la policía en diciembre pasado durante el registro de la vivienda de un amigo próximo a Hadzic en Novi Sad.

Según Vukcevic, algunos colaboradores de Hadzic le enviaron los últimos días mensajes clandestinos a través de los medios de comunicación advirtiendo de que se preparaba su captura, por lo que el prófugo aplazó 24 horas su reunión con el «contacto» en Fruska Gora.

En 1992 y 1993, Hadzic fue el presidente de la rebelde república serbia de Krajina, un territorio de Croacia poblado por serbios que se declararon independientes después de que los croatas proclamaran en 1991 la independencia de la ex Yugoslavia. Está inculpado en crímenes de guerra y contra la humanidad, por la expulsión de la población croata y no serbia de Krajina, asesinatos, persecuciones, torturas y tratamiento inhumano durante la guerra croata (1991-1995). Entre los crímenes que se le imputan resalta el cometido en el campo de Ovcara, cerca de Vukovar, en noviembre de 1991, cuando unos 200 prisioneros croatas fueron asesinados después de ser expulsados del hospital.