Clinton dice que Asad ha perdido la legitimidad para gobernar en Siria

EFE

INTERNACIONAL

La secretaria de Estado de Estados Unidos señala que el presidente sirio «no es indispensable» para liderar el país.

12 jul 2011 . Actualizado a las 12:28 h.

La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, dijo hoy que el presidente sirio, Bashar al Asad, «ha perdido su legitimidad» y «no es indispensable» para liderar el país, después de cuatro meses de protestas y violencia en Siria.

«Desde nuestra perspectiva, ha perdido la legitimidad, no ha cumplido las promesas que ha hecho, ha buscado y aceptado ayuda de los iraníes para reprimir a su propio pueblo, y hay una larga lista de acciones preocupantes», dijo Clinton en una conferencia de prensa junto a la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton.

«El presidente Asad no es indispensable, y no tenemos absolutamente ningún interés especial en que se mantenga en el poder», añadió la secretaria de Estado.

Clinton no llegó a instar al presidente sirio a abandonar el poder, como sí hizo el pasado abril con el líder libio, Muamar al Gadafi, pero las que pronunció hoy fueron las palabras más rotundas que el Gobierno de Estados Unidos ha dirigido al régimen desde que comenzaron las protestas.

Sus declaraciones se produjeron después de que un grupo de partidarios del presidente sirio, que Washington calificó de «matones», atacaran el complejo de la Embajada de Estados Unidos y la sede diplomática francesa en Damasco.

La titular de exteriores consideró ese ataque «un intento del régimen de Asad de distraer la atención mundial de la verdadera noticia que se está desarrollando en Siria», y aseguró que «no triunfará» en ese propósito.

«Si cualquiera, incluyendo el presidente Asad, piensa que Estados Unidos está confiando en secreto que el régimen emergerá después de estas revueltas, para continuar su brutalidad y su represión, están equivocados», sentenció Clinton.

El objetivo de Estados Unidos, añadió, es «ver cumplido el deseo del pueblo sirio de una transformación democrática» en el país.

En ese sentido, confió en que «cada vez más países denuncien» al líder sirio «tan vigorosamente como nosotros lo hemos hecho».

La falta de una condena explícita a la represión ejercida por el régimen de Asad por parte de la Liga Árabe, que sí se pronunció en contra del Gobierno de Gadafi en Libia, ha mermado el éxito de la presión internacional impuesta a Siria por EEUU y la Unión Europea.

Por su parte, Catherine Ashton, que se encuentra en Washington para asistir a una reunión del Cuarteto de Oriente Medio esta noche, indicó que la «preocupación más profunda» de la Unión Europea es la de la «violencia en Siria» y la «incapacidad del pueblo para hacer que se oiga su voz».

«Urgimos a Asad a hacer lo que ha prometido y albergar este diálogo correctamente», indicó la alta representante europea de Política Exterior.

Las revueltas populares en Siria desde el pasado marzo se han cobrado la vida de 1.410 civiles y de 348 militares y policías, según el recuento del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.