Jefes de Estado asisten a la conmemoración de la unificación de Italia

Redacción digital

INTERNACIONAL

El rey Juan Carlos viajó a Roma acompañado por el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves.

02 jun 2011 . Actualizado a las 16:38 h.

La conmemoración de los 150 años de la unificación de Italia y el Día de la República congregó hoy en Roma a 42 jefes de Estado, entre ellos el rey de España, y a 80 delegaciones internacionales que presenciaron un desfile militar y asistirán a un concierto sinfónico y una cena de honor.

Los jefes de Estado y los representantes internacionales presenciaron desde una tribuna un colorido desfile militar que se desarrolló por la vía de los Foros Imperiales, en el centro de Roma, en un día de sol radiante.

El rey Juan Carlos viajó a Roma acompañado por el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves y el jefe de la Casa Real, Alberto Aza Arias.

Don Juan Carlos, con traje azul y corbata roja, ocupó el primer puesto en el palco de honor y fue saludado durante varios minutos y con gran afecto por el presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, quien le agradeció su presencia.

Entre los invitados se encontraban presidentes como la argentina Cristina Fernández Kirchner, el chileno Sebastián Piñera, el ruso Dimitri Medvédev, el turco Abdulá Gul, el afgano Hamid Karzai, el alemán Christian Wulff, y otros presidentes europeos.

También presenciaron el desfile el presidente de Israel, Simón Peres, y el palestino, Mahmud Abás, mientras que desde EE.UU. llegó el vicepresidente, Joe Biden, además del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y desde Bruselas el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

Ante semejante concentración de personalidades políticas, se extremaron las medidas de seguridad y 2.500 agentes han blindado prácticamente la ciudad.

El primer acto de la primera celebración consistió en una homenaje al Soldado Desconocido en el monumento al rey Víctor Manuel II de Saboya, en la céntrica plaza Venecia, donde fue depositada una corona de laurel, con la izada de la bandera mientras sonaban los notas del himno nacional y el cielo era surcado por las «Flechas Tricolores», la patrulla aérea que dibujó la bandera italiana.

Una vez finalizada la ceremonia, el rey de España regresó a Madrid. Las conmemoraciones finalizarán con un concierto sinfónico vespertino y una cena de honor ofrecida por Napolitano en el Palacio del Quirinal, sede de la Jefatura del Estado. Napolitano ha invitado a los jefes de Estado extranjeros porque, según dijo, «la unidad de Italia no fue decisiva sólo para la historia de Italia, fue un gran episodio de la historia de la Europa moderna».