Un muro de acero intentará frenar la radiación al mar de Fukushima

Tokio / efe

INTERNACIONAL

Tepco intentará así taponar una salida al océano Pacífico conectada al reactor 2, por la que se tomaba agua utilizada en el edificio de turbinas cuando la central funcionaba adecuadamente.

10 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Tokyo Electric Power (Tepco), operadora de la central nuclear de Fukushima, comenzó ayer a instalar un muro de acero para prevenir que se filtre más agua con material radiactivo al mar, informó la agencia local Kyodo. Tepco intentará así taponar una salida al océano Pacífico conectada al reactor 2, por la que se tomaba agua utilizada en el edificio de turbinas cuando la central funcionaba adecuadamente.

Ahora, los técnicos temen que por ese conducto se esté filtrando agua altamente radiactiva al mar, por lo que lo bloquearán con siete placas de acero y una malla de material sintético de 120 metros de ancho.

El miércoles, los operarios de Tepco consiguieron detener una filtración de agua altamente contaminante descubierta cuatro días antes en una fosa de la central del Fukushima Daiichi cercana al mar, los niveles de radiactividad en el océano han seguido siendo altos, aunque bajaron desde el máximo de 7,5 millones sobre el límite legal.

La concentración de yodo radiactivo en aguas marítimas cercanas a la central un día después de que se detuvo la filtración era 63.000 veces superior a lo permitido.

Rusia, China y Corea del Sur han mostrado su preocupación por las filtraciones de material radiactivo al mar, así como por el vertido programado de unas 9.000 toneladas hasta el momento de agua con baja radiactividad al océano Pacífico.

Crece el número de víctimas

El número de muertos por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo en el noreste de Japón se elevó ayer a 12.898, al tiempo que otras 14.824 personas siguen desaparecidas, según el último recuento policial. Además, en más de 2.300 refugios temporales continúan evacuadas más de 153.000 personas provenientes en su mayoría de las provincias nororientales de Miyagi, Iwate y Fukushima, las más devastadas por la catástrofe.

Los damnificados comenzaron a recibir las llaves de las primeras viviendas prefabricadas en la provincia de Iwate, en el noreste del país.