Medvédev exige ceses por la inseguridad en el aeropuerto

rafael m. mañueco MOSCÚ / COLPISA

INTERNACIONAL

Afirma que la situación era de anarquía y la gente entraba por todas partes

26 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El presidente ruso, Dmitri Medvédev, y el primer ministro, Vladimir Putin, trataron ayer de mostrar que tienen la situación bajo control y que adoptarán severas medidas para intensificar la lucha contra el terrorismo y evitar más fallos de seguridad como los que permitieron que el lunes un terrorista suicida causase 35 muertos y más de un centenar y medio de heridos en el aeropuerto moscovita de Domodédovo.

Pero las amenazantes palabras de los dos máximos dirigentes del país son las mismas que repiten cada vez que se produce una tragedia similar. El ex primer ministro, Mijaíl Kasiánov, ha dicho que Medvédev y Putin «echan la culpa de todo a cualquiera con tal de no asumir ellos su propia responsabilidad política».

Ayer, el jefe del Kremlin dirigió su ira contra la gerencia del aeropuerto, la compañía privada East Line, y los responsables de la policía.

Medvédev advirtió que Domodédovo deberá responder por los fallos. «Lo que ocurrió demuestra que hubo infracciones evidentes de las normas de seguridad, no es tan sencillo meter -en la terminal- tal cantidad de explosivos», dijo.

«Los testimonios de la escena del crimen muestran que eso era la anarquía. La gente estaba autorizada a entrar en todas partes», denunció Medvédev, según informa AFP.

De hecho, la comisión investigadora del atentado anunció la apertura de un expediente contra los responsables de la terminal aérea, por desacato de las normas de seguridad.

La dirección del aeropuerto se ha defendido alegando que es la policía la que se encarga de vigilar los accesos.

Medvédev también exigió ayer ceses entre los mandos de las fuerzas del orden y mantiene que hay que endurecer más los controles. «Ordeno al ministro del Interior que proponga dimisiones u otra clase de medidas para los responsables de la seguridad en el transporte», declaró ante la cúpula del Servicio Federal de Seguridad (antiguo KGB), según Efe.

Un kamikaze

Mientras, la investigación parece avanzar con dificultad. Ahora, las fuerzas de seguridad rechazan la versión de que fue una mujer la que explotó la carga y aseguran que fue un hombre acompañado hasta el aeropuerto por sus compinches.

La agencia Rosbalt, que cita sus propias fuentes, cree que los organizadores de la masacre podrían haber sido los miembros de un grupo wahabita de la región de Stávropol denominado Batallón Nogaiski. Un oficial de la policía rusa se justificaba ayer asegurando que sabían que se preparaba un ataque, pero creyeron que lo ejecutaría una mujer, no un hombre, como sucedió al final.