Roma, de nuevo en estado de alerta por un paquete bomba y ocho falsas alarmas

María Signo ROMA/LA VOZ.

INTERNACIONAL

La policía presume que el envío es obra del grupo anarquista que reivindicó los ataques del pasado jueves

28 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Un paquete explosivo desactivado en la Embajada de Grecia y las falsas alarmas en otras ocho sedes diplomáticas desató ayer de nuevo la alarma en Roma, cuatro días después de que otros dos artefactos estallaran en las representaciones de Suiza y Chile, hiriendo de gravedad a una persona.

El nuevo artefacto explosivo estaba dentro de un sobre amarillo similar a los que se emplean para el envío de objetos frágiles y contenía un disco compacto que al ser retirado funciona de detonador.

Aunque llegó el día de Nochebuena, «nadie lo abrió a causa de las fiestas», explicó el embajador Michael E. Cambanis. Ayer notaron algo sospechosos y por eso se avisó rápidamente a la policía, «que llegó en tres minutos». «Fue una intervención perfecta», añadió el embajador al comentar la desactivación del explosivo.

Para la policía, el paquete «no explotó por casualidad» y, según fuentes de los carabineros, se analiza la hipótesis de que detrás de este nuevo envío esté la Federación Anarquista Informal (FAI), el grupo que el jueves reivindicó el envío de paquetes bomba a las Embajadas de Suiza y Chile. Para el comandante de los carabineros en Roma, Maurizio Mezzavilla, este artefacto era «parecido a los otros y también llegó por correo ordinario».

El miedo se extendió a otras representaciones diplomáticas en la capital italiana. La policía, que en colaboración con el Ministerio de Exteriores mantiene abierto un dispositivo de seguridad, vivió un día agitado ante las numerosas alarmas que se sucedieron durante todo el día. En las Embajadas de Venezuela, Mónaco, Dinamarca y Kuwait paquetes sospechosos resultaron ser felicitaciones navideñas o agendas. Los artificieros también acordonaron las sedes diplomáticas de Albania y la de Finlandia ante el Vaticano. Los envíos sospechosos eran una agenda y un calendario. Más tarde le tocó el turno a las de Egipto y Eslovenia.

El alcalde de Roma, Gianni Alemanno, expresó su preocupación: «Antes que nada hace falta entender si forman parte de la misma oleada. Esto significa, y lo hemos entendido desde el primer momento, que existe un grupo anarquista terrorista que quiere dar una señal a nivel internacional eligiendo, desafortunadamente, nuestra ciudad».

Pista anarquista europea

La Fiscalía de Roma cree que los envíos podrían repetirse. De este modo, sigue la pista del grupo anarquista FAI. En su reivindicación sobre los ataques del pasado jueves, el grupo anarquista expresaba su «solidaridad revolucionaria» con «compañeros prisioneros y a los grupos que en Grecia, Chile, México, España, Argentina y cualquier otro lugar atacan sin parar, levantando cada vez más el objetivo», lo que hace pensar que las embajadas de estos países pueden ser objeto de envíos de paquetes bomba.