«Estamos sanos y con hambre», afirman los mineros atrapados

Moisés Ávila Roldán COPIAPÓ/AFP.

INTERNACIONAL

Comienzan a enviar alimentos y fármacos a los obreros localizados 18 días después del accidente.

24 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Los equipos de rescate comenzaron ayer a alimentar a los 33 mineros atrapados desde el 5 de agosto en el yacimiento San José, en el norte de Chile, tras haber sido localizados milagrosamente el domingo, e iniciaron un rescate que podría durar hasta Navidad. Un rescate que será una odisea técnica y humana, amenazada siempre por la posibilidad de nuevos derrumbes y fallos técnicas. Y todo bajo la atenta mirada de las familias reunidas en un campamento muy cercano al pozo, al que le han puesto el nombre de Esperanza.

«Estamos todos sanos y con hambre», dijeron en su primera comunicación telefónica con la superficie. Después de hablar con ellos durante una hora a través de un citófono, la médica a cargo del operativo de supervivencia, Paula Newman, señaló que «los 33 están en perfecto estado de salud». «Están ilesos. No hay traumatizados», agregó en compañía del ministro de Minería, Laurence Golborne, que lucía relajado tras las grandes emociones del domingo.

Según Newman, los mineros «tienen molestias bastante menores para lo que cabría esperar» después de permanecer 18 días en el interior del yacimiento, a 700 metros de profundidad y sometidos a altas temperaturas y humedad.

Primeros envíos

Para poder alimentarlos, ayer se aseguró un conducto de unos ocho centímetros de diámetro por donde el domingo se logró hacerlo.

A través de las llamadas palomas mecanizadas -unos tubos de plástico azules- se les envió agua con glucosa y un medicamento para evitar que el estómago sufra úlceras por la falta de alimentación y oxigeno. Lo siguiente en enviárseles fueron alimentos proteicos en forma de gel, junto con linternas y un equipo de comunicación.

Chile pedirá ayuda a la NASA para mantener con vida a los mineros, ya que considera que sus condiciones son similares a las que afrontan los astronautas de la estación espacial.

Tras la euforia del domingo, cuando se recibieron pruebas de supervivencia de los 33 mineros, el ambiente ayer era más pausado, con las familias haciéndose a la idea de que sacar a los mineros llevará meses. De hecho, si se cumplen los plazos dados por el coordinador de las tareas de rescate, André Sougarret, los podrían sacar cerca de la Navidad. «Ya está listo el cordón umbilical», dijo Sougarret para ilustrar que la primera parte del operativo está listo. «Ahora viene el diseño de ingeniería, la topografía, y después empieza el trabajo de perforación», añadió.

Llega la perforadora

La perforadora Raisebore Strata 950 llegó ayer al yacimiento San José tras un viaje entre aplausos de quienes la vieron pasar por ciudades y carreteras. La perforadora bajará a una velocidad de 15 metros por día.

La historia increíble de los mineros ha generado una euforia inédita en Chile. Desde que el presidente Sebastián Piñera mostró el papel con las palabras «Estamos bien en el refugio los 33», la celebración no ha cesado. Más serio, Piñera anunció ayer sanciones para «todos los que tengan responsabilidades» en el accidente. Mientras, Leonardo Farkas, un millonario empresario minero, regaló ayer cinco millones de pesos (unos 7.740 euros) a la familia de cada uno de los 33 obreros.