Los «tories» aumentan las ofertas para seducir a los liberales

La Voz

INTERNACIONAL

11 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Tras el anuncio realizado por el primer ministro, Gordon Brown, los conservadores movieron ficha en esta enrevesada partida de ajedrez política. Su jefe negociador y portavoz de Exteriores, William Hague, indicó que el partido estaba dispuesto a ofrecer a los liberaldemócratas un referendo sobre la reforma del sistema electoral, en un Gobierno de coalición. Hague también calificó de «gran error» que los liberaldemócratas hayan iniciado conversaciones formales con un partido que tiene la intención de colocar un segundo primer ministro sin haber sido elegido en las urnas.

Durante todo el día, la sensación fue de incertidumbre, «ni hay acuerdo ni desacuerdo». La confusión sobre lo que estaba sucediendo entre los bastidores de Westminster era ayer absoluta, en un país en el que los ciudadanos no están acostumbrados a ninguna perturbación política. Cuando todo parecía estar encaminado hacia una resolución, que podía llegar con el almuerzo, con el té, los parlamentarios liberaldemócratas indicaron a Clegg que lo logrado por el equipo negociador con los tories no era suficiente para entregar su apoyo en algún tipo de colaboración.

Los parlamentarios de Clegg aconsejaron a su líder que pidiera aclaraciones a los conservadores sobre sus ofertas, pero que, al mismo tiempo siguiera hablando con los laboristas. El jefe negociador de los Lib Dem, David Laws, indicó que no se habían alcanzado acuerdos definitivos con los tories en materia de educación, fiscal, economía y reforma política (sistema electoral), lo cual era como decir que siguen enfrentados en los puntos principales de los divergentes programas electorales. Laws recordó, para sorpresa de todos: «Seguimos de acuerdo en la necesidad de contar con un Gobierno fuerte por el interés nacional».