Brasil y España mantienen unas excelentes relaciones económicas y políticas que desean ampliar a lo social, para lo cual «será importante» la enseñanza del español en escuelas brasileñas, dijo hoy el embajador español, Carlos Alonso Zaldívar.
Según el diplomático, las relaciones económicas «van muy bien» y han sido apuntaladas por la muy fuerte inversión que han hecho las empresas españolas en Brasil durante los últimos quince años, que suman más de 35.000 millones de dólares y ha convertido a España en el segundo inversor extranjero en el país, por detrás de EEUU.
Lo mismo ocurre en el plano político, en el que existe una total «sintonía» entre los Gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva y José Luis Rodríguez Zapatero, que trasciende lo bilateral y se extiende a «asuntos globales, como el cambio climático y la reforma de la ONU», entre otros asuntos, dijo Alonso Zaldívar en rueda de prensa.
El embajador apuntó que, en contrapartida, las relaciones entre las sociedades española y brasileña son «débiles» si se las compara con el resto de América Latina, lo que atribuyó en buena parte a la diferencia de lenguas.
«Tanto a Brasil como a España les interesa corregir eso», declaró el diplomático, quien consideró «muy importantes» en ese sentido los planes para la enseñanza de la lengua de Cervantes en las escuelas brasileñas, que se basan en una ley sancionada por Lula en 2005.
Alonso Zaldívar también valoró un acuerdo suscrito a mediados de este año por el Ministerio de Educación de Brasil y el Instituto Cervantes, mediante el cual esa institución española colaborará con la formación de profesores de español y con la enseñanza de la lengua en las escuelas brasileñas a través de internet.
«Eso puede llevar a que 40 ó 50 millones de niños brasileños aprendan el español, lo que supondría una experiencia única en el mundo», dijo el diplomático.
El embajador comentó además que la presidencia española de la Unión Europea (UE) durante el primer semestre del 2010 servirá para acercar aún más a España de Brasil y del resto de América Latina.
Citó en particular la decisión de retomar las negociaciones para un acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur, que forman Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, ya discutida por España y los países del bloque suramericano durante la reciente Cumbre Iberoamericana celebrada en Estoril (Portugal).
«Fue precisamente Brasil el que dijo que la negociación entre el Mercosur y la UE debía dinamizarse ahora, tras el fracaso de la Ronda de Doha», indicó el embajador.