Suecia quiere un solo candidato a presidente en la cumbre de la UE

Juan Oliver

INTERNACIONAL

La presidencia rechaza una propuesta de varios socios de presentar una lista de aspirantes en la cita del día 19

12 nov 2009 . Actualizado a las 09:26 h.

La presidencia sueca de la Unión Europea convocó ayer a los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete a una cumbre extraordinaria el próximo jueves en Bruselas en la que deberán elegir al nuevo presidente permanente del Consejo y al alto representante para las Relaciones Exteriores que sustituirá a Javier Solana.

El primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, se comprometió a presentar ese día a un solo candidato por puesto, en contra de la petición de un grupo de países, encabezado por Polonia y del que forman parte Finlandia y varios socios del Este, que pretendían contar con un listado de aspirantes que expusieran su programa ante el Consejo, para que este se pronunciara sobre el más idóneo en una votación posterior. «Cualquiera que haya estado en política sabe que eso es poco realista», respondió Reinfeldt en una rueda de prensa en el Parlamento Europeo, ante cuyo pleno intervino ayer para presentar el balance de su mandato.

Reinfeldt recordó que algunos de los principales aspirantes, como el belga Herman Van Rompuy, el luxemburgués Jean Claude Juncker y el holandés Jan Peter Balkenende, son políticos en activo que no están dispuestos a postularse sin tener garantías plenas de que cuentan con apoyos suficientes para ser elegidos. «Un primer ministro no puede decir a sus ciudadanos: ''Aspiro a otro trabajo, pero el lunes estoy de vuelta si no lo he conseguido. Aún así, os quiero''», ironizó el líder sueco.

Mayoría cualificada

El primer ministro reconoció que la lista de presidenciables es muy amplia e incluye bastantes más nombres que los tres citados. No lo dijo expresamente, pero entre ellos siguen figurando el ex primer ministro británico Tony Blair, y también la irlandesa Mary Robinson y la letona Vaira Vike Freiberga, entre otros. De hecho, como explicó gráficamente Reinfeldt, «hay muchos más nombres que cargos», por lo que la presidencia sueca no descarta que la decisión final tenga que adoptarse por mayoría cualificada y no por unanimidad, e incluir en el proceso el cargo de secretario general del Consejo.

El primer ministro sueco subrayó también que aún no ha terminado la ronda de consultas con todos los socios, pero admitió que no será fácil adaptarse a las aspiraciones de todos ellos dado que distan mucho entre sí. «El principal equilibrio es el político, entre la izquierda y la derecha, pero también hablamos de equilibrio de Estados miembros, entre pequeños, medianos y grandes, entre norte y sur, entre oeste y este, entre mujeres y hombres... Será difícil aunarlos todos en solo dos cargos», aventuró.

De momento, el nombre más equilibrado parece el de Von Rompuy, y no porque despierte adhesiones entusiastas, sino precisamente porque es el que menos rechazos está suscitando. El sobrio y discreto líder belga aparece hoy como el candidato con más posibilidades, aunque podría perder esa condición de la noche a la mañana si Francia y Alemania, que han pactado apostar por un mismo aspirante, no lo apoyan expresamente.

Cena en París

Al cierre de esta edición, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, cenaban en el palacio del Elíseo de París tras los actos de conmemoración del final de la Primera Guerra Mundial en la capital gala, a los que, por primera vez, asistió un jefe de Gobierno germano. Sus respectivos portavoces no quisieron desvelar qué temas estaban sobre la mesa, aunque nadie duda de que gran parte de la velada se dedicará a acordar el nombre que defenderán conjuntamente ante los Veintisiete.

Esa posición de fuerza ha disgustado en varias capitales, que se niegan a que el proceso de elección de presidente se limite a la aceptación por parte de los países pequeños del candidato propuesto por los grandes. Y el propio Reinfeldt ha apoyado ese argumento: «Esta no es una historia en la que dos personas nos digan a todos los demás qué es lo que tenemos que hacer».