El ex ministro francés condenado por tráfico de armas implica a Chirac y Juppé

EFE

INTERNACIONAL

Charles Pasqua ha sido condenado a un año de cárcel.

29 oct 2009 . Actualizado a las 12:14 h.

El ex ministro francés del Interior Charles Pasqua, condenado a un año de cárcel por su implicación en una red de tráfico de armas a Angola en los años 90, implicó a los ex jefes de Estado Jacques Chirac y François Mitterrand, así como a los ex primeros ministros Édouard Balladour y Alain Juppé.

Pasqua, quien solicita la desclasificación de «muchos documentos» sobre los que pesa el secreto de Estado, aseguró en una entrevista publicada hoy en «Le Figaro» que «con esos documentos se tendrá la prueba de que todo el mundo estaba al corriente de la venta de armas a Angola».

«Bajo el mandato de François Mitterrand, de 1993 a 1995, después bajo la presidencia de Chirac, de 1995 a 1998. Además, los dos primeros ministros concernidos, que son Édouard Balladour y Alain Juppé», todos estaban al corriente, señaló Pasqua, que en la actualidad ocupa un escaño de senador.

El ex ministro del Interior, que ha anunciado que recurrirá su sentencia, pidió a Chiraq que «asuma sus responsabilidades» y que reconozca que estuvo de acuerdo en condecorar al empresario Arcadi Gaydamak.

Se trata de un empresario condenado a seis meses de cárcel, al igual que el hombre de negocios Pierre Falcone, responsables de la trama que traficaba con armas en Angola entre 1993 y 1998, período en el que éste país, en plena guerra civil, estaba sometido a un embargo decretado por las Naciones Unidas.

Según la sentencia, Pasqua ingresó comisiones ilegales de Falcone y Gaydamak, este último condecorado con la orden del Mérito, homenaje que «toma todo su significado» porque Chirac estaba de acuerdo con condecorarle y al corriente de las operaciones, según Pasqua.

El ex ministro considera que la persecución judicial a la que dice que fue sometido responde a una represalia del Elíseo porque tenía aspiraciones de convertirse en presidente de Francia y no descarta que el primer ministro Dominique de Villepin, cuando era secretario de Chiraq, pudiera haber estado implicado.

Pasqua insiste en levantar el secreto de defensa en ese tipo de operaciones porque es un sistema que permite que «intermediarios que han podido recibir comisiones devuelvan la bala a los políticos» y se pregunta por qué no se desclasifican los documentos «si nadie tiene nada que reprocharse».

«Hay que saber qué paso en ese asunto y en todos los otros, las ventas de barcos, Clearstream...», agrega el ex ministro.