Tropas de Camboya y Tailandia se enfrentan por una zona fronteriza

Jordi Calvet

INTERNACIONAL

16 oct 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Las tropas de Camboya y Tailandia se enfrentaron ayer en la frontera, después de cuatro meses de tensión causada por la disputa que los dos países mantienen por la soberanía de una zona próxima a las ruinas del antiguo templo de Preah Vihear. Dos soldados camboyanos murieron y siete militares tailandeses resultaron heridos.

Durante cerca de una hora y de manera intermitente, las fuerzas de los dos países intercambiaron fuego de artillería y disparos de armas ligeras.

Poco después del enfrentamiento, el más serio desde que resurgió la disputa territorial que arrancó hace ya más de medio siglo, los dos países se acusaron mutuamente de provocarlo y de invadir su suelo soberano. «Las tropas tailandesas han entrado en nuestro territorio», aseguró en Phnom Penh a la prensa el ministro de Defensa camboyano, Hor Namhomg. Por su parte, el viceportavoz del Ministerio de Exteriores tailandés, Thani Thongphakdi, dijo que «los militares de nuestro país han informado de que los camboyanos dispararon antes y de que respondieron para defenderse».

El enfrentamiento tuvo lugar en un claro del espeso bosque a dos kilómetros al oeste del acantilado en el que se encuentran situadas las históricas ruinas, y después de que allí tomaran posiciones cerca de medio centenar de soldados tailandeses.

Plan de evacuación

Después del incidente, el Gobierno tailandés instó a todos sus ciudadanos a abandonar Camboya de inmediato e informó de que tenía listo el plan de evacuación por medio de varios aviones militares de transporte que desde el día anterior se encontraban preparados para despegar de una base próxima a Bangkok. «El plan de evacuación está preparado, no hay necesidad de que los tailandeses continúen en Camboya, por favor, apresúrense a regresar», dijo el ministro de Exteriores tailandés, Sompong Amornvivat.

Por su parte, el Gobierno tailandés llamó a consulta con carácter urgente al jefe de la representación diplomática de Camboya en Bangkok para hacerle entrega de una nota de protesta por la «agresión».

Un día antes del enfrentamiento, el primer ministro de Camboya, Hun Sen, había dado un ultimátum de 24 horas a las tropas tailandesas para que se retirasen del territorio situado en torno a lo que queda del templo, algo a lo que Bangkok se negó.

El hecho agrava la crisis política tailandesa, en donde la oposición, con un marcado componente nacionalista, mantiene en jaque al Gobierno. No obstante, los turistas siguen en el país a pesar del combate y la crisis.