Medvédev advierte a Europa de que el respaldo que prestó a Kosovo le «costará caro durante décadas»

Efe

INTERNACIONAL

04 jul 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El reconocimiento por Occidente de la declaración unilateral de independencia de Kosovo «es un peligroso y desgraciado precedente, que costará caro a Europa durante décadas», advirtió el presidente ruso, Dmitry Medvédev. En una entrevista con el diario británico The Guardian , el número uno del Kremlin señaló que «es evidente que toda una serie de regímenes separatistas explotarán [ese hecho] para justificar sus propios deseos de estatus legal» de independencia.

Medvédev, que se reunirá la semana que viene con el presidente norteamericano, George W. Bush, en la estación balnearia de Toyako (Japón), criticó al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, por haberse declarado públicamente a favor de la decisión de la UE de sustituir la administración de las Naciones Unidas en la antigua provincia serbia por una presencia de la propia UE. Según Medvédev, las decisiones «tiene que adoptarlas el Consejo de Seguridad. Y resulta extraño que sin que el Consejo se haya pronunciado, sin embargo, el secretario general se pronuncie en público». Preguntado por Irán, Medvédev critica también a la UE por reforzar las sanciones contra ese país y congelar los activos de su banco principal justo cuando progresaban las negociaciones.

«Si estamos en conversaciones con ellos, deberíamos evitar las acciones capaces de irritar al liderazgo iraní y que puedan llevar a nuevas sanciones. No entiendo por qué la Unión Europea emprendió su última acción [contra Irán]», agregó.

Por otra parte, Medvédev aceptó ayer la renuncia de Roman Abramóvich como gobernador de la región de Chukotka, en el extremo oriente del país. El decreto presidencial señala que el propio Abramóvich, multimillonario ruso, propietario del club de fútbol Chelsea, presentó su dimisión.

Desde hace dos años, la prensa recogía filtraciones sobre el deseo del multimillonario de abandonar el cargo. El magnate fue elegido gobernador en el 2000 por sufragio y reelegido en octubre del 2005 por la asamblea legislativa local a propuesta de Putin. Abramóvich tiene una fortuna estimada en unos 18.700 millones de euros.