«Nosotros creímos que los etarras iban a dar clases de terrorismo a los guerrilleros, pero resultó ser al revés»

María Pérez-Pla

INTERNACIONAL

31 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

«Por primera vez hay una prueba, una evidencia de que ETA vino a entrenarse a Colombia en el 2003, eso me parece gravísimo», explicó a La Voz el ex presidente colombiano Andrés Pastrana, que aparece como uno de los objetivos de las FARC y ETA en España.

Pastrana se sentó a negociar la paz con las FARC entre 1999 y el 2002, pero rompió el proceso ante las numerosas evidencias de que el grupo guerrillero seguía delinquiendo. Al término de su mandato, en agosto del 2002, el ex presidente se fue a vivir a España, donde las FARC pretenden «ajusticiarlo», según los documentos publicados ayer por La Voz.

«Es la primera vez que tengo conocimiento de esta situación, nunca en la información privada que conocí como presidente supe que miembros de ETA habían estado en Colombia», afirmó ayer Pastrana.

Durante las negociaciones de paz corrieron rumores sobre la presencia de miembros de la banda terrorista vasca en la zona desmilitarizada, que crecieron cuando las autoridades colombianas detuvieron a tres supuestos miembros del IRA.

El ex presidente se sorprendió al conocer que, según los documentos encontrados en el ordenador del segundo de las FARC, Raúl Reyes, abatido el pasado 1 de marzo, ETA fue a Colombia a recibir cursos y no a impartirlos, como han asegurado en otras ocasiones algunos cargos de la inteligencia nacional.

«Lo que me llama la atención es que nosotros creímos que los etarras iban a dar clases de terrorismo a los guerrileros de las FARC, pero resultó ser al revés, ellos se hicieron presentes para tener entrenamiento en territorio colombiano. ¿Cuántos se han entrenado y cuál es su presencia acá?», se pregunta el ex presidente, molesto porque ha accedido a la información a través de la prensa y ninguna autoridad colombiana se ha dirigido a él para explicarle la magnitud real de la relación de la banda con la guerrilla.

«Esto es una prueba de los contactos de grupos terroristas a nivel mundial y es muy complicado, porque puede haber más correos que no conocemos», reflexiona.

Pastrana afirma que durante su estancia en España, unos tres años, nunca le alertaron del peligro que podía estar corriendo. Sin embargo, alaba la actitud del Gobierno español de entonces, que le brindó protección como ex presidente. Cabe recordar que las relaciones de Andrés Pastrana con José María Aznar eran excelentes.

El ex mandatario se muestra preocupado por la futura actitud de las FARC, pues en los documentos, Alfonso Cano, quien sugiere el atentado, es en la actualidad el número uno. «Todavía siendo yo presidente, Cano puso precio a mi cabeza, lo que posiblemente implique que ahora hay una línea mucho más dura en las FARC», asegura.