El primer ministro griego, Costas Karamanlis, llegó ayer a Ankara en la que es la primera visita oficial de un jefe de Gobierno heleno a Turquía desde 1959, para abordar con su colega turco, Recep Tayip Erdogan, los conflictos que han llevado los dos países al borde de la guerra en repetidas ocasiones.
Karamanlis sigue los pasos que en mayo de 1959 dio su tío, el fallecido mandatario Constantinos Karamanlis, para estrechar lazos como parte del acercamiento que se inició entre los países vecinos en 1999, tras los desastrosos terremotos en ambos países, que establecieron un puente de solidaridad.
Expertos de ambos Estados han celebrado en los últimos años 37 reuniones exploratorias para sentar las bases para resolver las disputas de soberanía en el mar Egeo. La tensión cotidiana se mantiene, entre otros casos, con la amenaza de casus belli si Grecia decide extender de seis a doce millas sus aguas territoriales en el Egeo.