Cristina Fernández acusa a EE.UU. de montar una trama contra ella

Agustín Bottinelli

INTERNACIONAL

14 dic 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

A la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, le toca enfrentar, a solo tres días de haber asumido el Gobierno de su país, el obstáculo internacional más áspero y que pone en riesgo las relaciones con Estados Unidos.

Ayer, la mandataria lanzó una dura réplica a EE.?UU. por el llamado escándalo de la valija y acusó a ese país de encabezar «una operación basura» contra su Ejecutivo.

«Hay basurales de la política internacional que más que indicar crecimiento y desarrollo indican tragicómicamente la involución del desarrollo de las relaciones internacionales», disparó Cristina Fernández.

«En esta forma de operar en la política regional, no van a tener resultados. Esta presidenta no se va a dejar presionar», lanzó. Y agregó: «Más que países amigos, quieren países empleados y subordinados».

Fernández también reafirmó la relación que une a Argentina con el presidente venezolano, Hugo Chávez: «Voy a seguir afirmando nuestra relación de amistad con nuestros países latinoamericanos, también con Venezuela. Voy a seguir afirmando la necesidad de profundizar y ampliar el Mercosur».

La respuesta de Cristina Fernández estuvo motivada por las detenciones en Miami de tres venezolanos y un uruguayo relacionados con la causa en la que se investiga el escándalo de la valija con los 800.000 dólares que el empresario estadounidense-venezolano Guido Alejandro Antonini Wilson intentó introducir en Buenos Aires el 4 de agosto. Este último está reclamado por la Justicia argentina, por eso desde el Gobierno se habla de que Washington intenta entorpecer la Justicia argentina por no extraditarlo.

Los arrestados están acusados de ser agentes encubiertos de Venezuela y de presionar a Antonini para que no revelara el origen y el destino del dinero decomisado. Pero el fiscal federal adjunto de Miami, Thomas Mulvihill, dijo en la audiencia del miércoles que el detenido Franklin Durán mencionó en una conversación grabada que el dinero era para la campaña electoral de Cristina Fernández.

Los hombres de confianza de la presidenta, Alberto Fernández, jefe de Gabinete, y Aníbal Fernández, ministro de Justicia, tuvieron una dura reacción. El primero dijo que «el desprecio de EE.?UU. por la relación con Argentina es algo que estamos corroborando». Y explicó que «es una locura pensar que el Gobierno venezolano traía plata [dinero] para la campaña presidencial». El titular de Justicia aseguró que «lo que están presentando en Miami es una estupidez». Y entiende que es una «represalia respecto de la vocación que puede tener EE.?UU. con Venezuela. Que no metan a Argentina ni enloden a la presidenta. Esto es una verdadera canallada».