Zapatero reparte millones para la cohesión social en Latinoamérica

Ramón Gorriarán

INTERNACIONAL

10 nov 2007 . Actualizado a las 04:02 h.

José Luis Rodríguez Zapatero quiso mostrar su grado de compromiso con los esfuerzos por la cohesión social en América Latina con un generoso reparto de millones, destinados a un fondo del agua y a una base en Panamá para ayudas de emergencia al fondo del convenio de la Seguridad Social para inmigrantes.

Como el pariente rico que se preocupa por sus familiares pobres, Zapatero tiró de chequera. Así se puede resumir su intervención en la decimoséptima Cumbre Iberoamericana que se celebra en Santiago de Chile. Así, anunció ante los gobernantes de los 22 países asistentes la creación de un fondo del agua que España dotará con 1.500 millones de dólares para los próximos cuatro años. Justificó la decisión en que «mejorar el acceso al agua y a los saneamientos es un objetivo fundamental para la cohesión», tema de debate de la cumbre, y en que en Latinoamérica 58 millones de personas no tienen acceso al agua y 138 millones carecen de saneamiento.

En la reunión previa que mantuvo con los líderes centroamericanos ofreció crear una base permanente en Panamá con material español para hacer frente a emergencias por desastres naturales, como los registrados estos días en México y en la República Dominicana, que han forzado la ausencia de sus presidentes en la cumbre.

También se comprometió a costear un plan de seguridad para los próximos cuatro años en Centroamérica que requerirá una inversión anual de 12 millones de euros. El coste global de este programa ascenderá a 60 millones «ampliables» y se centrará en combatir la violencia doméstica, la juvenil, y en la lucha contra la impunidad.

Esto en lo que se refiere a programas cuantificados, ya que el Gobierno español también asumirá la parte del león del Convenio Iberoamericano de Seguridad Social, puesto que la mayoría de los inmigrantes de la región tienen como destino España, donde concluyen su vida laboral. El acuerdo establece que será la Administración del último país de residencia la que se haga cargo de las pensiones y otras prestaciones en coordinación con la de la nación de origen. La inversión que exigirá este convenio aún no se ha cuantificado porque no se sabe cuántos inmigrantes terminarán su vida laboral en España.

Aunque los 22 mandatarios dieron un énfasis particular al tema de la cohesión social -impulsado por la anfitriona Michelle Bachelet-, mostraron serias diferencias sobre la manera de abordarlo. Tres lanzaron cargas de profundidad contra el concepto de cohesión social: Hugo Chávez, Rafael Correa y el vicepresidente cubano, Carlos Lage. «Se pueden encontrar pobres más pobres que en África y en Asia, y ricos más ricos que en Suiza. Mientras haya esas diferencias insultantes y abismales, ¿de que cohesión social vamos a hablar?», dijo Chávez.