Cristina de Kirchner se apartará de la línea de su esposo en política exterior «Una nueva dinastía política» «Una mujer en el poder» «La esposa del presidente saliente»

Agustín Bottinelli

INTERNACIONAL

30 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La prensa de EE.?UU. traza una comparación entre los Kirchner y Hillary y Bill Clinton. El diario neoyorquino habla del triunfo de la primera dama de Argentina, para después destacar que el país sudamericano parece encaminarse a «una nueva dinastía política».

El diario venezolano titula en su portada con una gran foto: «Argentina tiene a una mujer de presidenta», para hablar del triunfo en la primera vuelta de Cristina para «suceder a su esposo, Néstor Kirchner», y destacar las denuncias de fraude.

El periódico izquierdista destaca la victoria de «la esposa del presidente saliente, Néstor Kirchner», con un cómodo triunfo en la primera vuelta. Mientras, Le Monde prefiere resaltar que el país sudamericano tiene a la primera presidenta de su historia elegida en las urnas.

El poder en Argentina cambiará de manos el próximo 10 de diciembre, pero va a quedar en familia porque Néstor Kirchner impondrá los atributos de presidenta a su propia esposa, Cristina Fernández, que el domingo ganó las elecciones con el apoyo del 44,70% de los votos. Este poder marital genera un hecho inédito en las democracias del mundo que se une a que la actual senadora será la primera mujer en acceder a la Presidencia de Argentina a través del voto popular. Se une así al club de la socialista Michelle Bachelet, en Chile.

Cristina -como le gusta que le llamen-asumirá el poder en diciembre con una amplia mayoría en ambas Cámaras del Congreso. Además, el oficialista Frente para la Victoria y sus aliados ganaron en las ocho provincias que eligieron gobernador.

La indiscutible recuperación económica del país, producida durante los cuatro años de mandato del presidente Kirchner, ha consolidado su imagen política y, a pesar de las críticas sobre su exceso de rigidez en el poder y poca tolerancia hacia quienes discrepan con su forma de hacer las cosas, le ha permitido que la ciudadanía acepte la continuidad de su plan de Gobierno a través de su esposa.

Caos

Las elecciones se celebraron en medio de un caos sin precedentes. Esto generó desconfianza en la principal rival de Cristina, Elisa Carrió, que tardó varias horas en reconocer el triunfo de su adversaria debido a la lentitud de los datos oficiales de los centros urbanos donde había ganado con holgura, como las ciudades de Buenos Aires, Rosario y Mar del Plata. Cristina recibió, en cambio un amplio apoyo en la provincia de Buenos Aires.

Carrió confirmó ayer que ya no volverá a ser candidata a ningún cargo público, y que su papel estará en la oposición.

Cristina seguirá el camino comenzado por su esposo, pero con matices en cuanto a las relaciones internacionales. Ella es mucho más abierta al diálogo, tiene menos prejuicios antinorteamericanos y mantendrá a Hugo Chávez a una distancia prudencial, «juntos pero no revueltos», aseguran que dice la flamante presidenta.

Ayer, la Bolsa de Buenos Aires marcó un nuevo récord, los empresarios hicieron declaraciones optimistas y los sindicatos prometieron su apoyo, síntomas positivos para recibir a la nueva presidenta.