El caso que llevó a la captura de la familia del ex dictador

AFP

INTERNACIONAL

05 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

El fallecido ex dictador Augusto Pinochet y su familia fueron acusados desde el 2004 de malversación de fondos públicos tras detectarse cuentas secretas en el Banco Riggs de Washington y otras entidades.

Según la justicia, el ex dictador, con complicidad de su familia, ocultó casi 27 millones de dólares en un centenar de cuentas bancarias abiertas en el exterior a través de intrincadas maniobras financieras.

El caso estalló en el 2004, cuando una investigación del Senado de EE.?UU. detectó un centenar de cuentas corrientes a nombre de Pinochet y su familia en el Banco Riggs.

En las maniobras, Pinochet cometió fraude tributario, falsificó documentos públicos y omitió maliciosamente información en la declaración de sus bienes en 1989, según una resolución en el 2005 del juez Carlos Cerda, quien ayer dictó la captura de la familia del ex dictador.

La compleja trama para ocultar esa fortuna comenzó en 1981 en plena dictadura (1973-1990). Tras entregar el Gobierno en 1990, Pinochet siguió ocho años de comandante en jefe del Ejército. Desde ese puesto realizó los mayores depósitos en el Riggs y en entidades de otros países, en las que hasta el 2004 acumuló unos 27 millones de dólares.

Las cuentas fueron abiertas por medio de «inversionistas no residentes en dichos países» o sociedades financieras constituidas con identidades o pasaportes falsos. Por esa razón, los depósitos quedaron excluidos de tributación, y al usar identidades falsas Pinochet percibió ganancias no declaradas y evitó aparecer vinculado a esas operaciones ante el fisco.

En esas maniobras, Pinochet usó identidades adulteradas como variantes de su nombre, como Augusto P. Ugarte; A. Ugarte; José Ramón Ugarte y J.P. Ugarte, además de alias de Daniel López y John Long. En total logró evadir en impuestos más de 2,2 millones de dólares, según una resolución judicial que en el 2005 ordenó su arresto. En enero del 2005, el Banco Riggs reconoció haber ocultado sus cuentas y aceptó pagar una multa de 16 millones de dólares.