El primer partido de Flandes se refunda tras ser ilegalizado por racista

La Voz D. S. | CORRESPONSAL BRUSELAS

INTERNACIONAL

10 nov 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

El fiero león negro que ondea en las banderas del Vlaams Blok (Bloque Flamenco) ha dejado de rugir. Pero sólo por unos días. Después del fallo dictado el pasado martes por el Tribunal Supremo de Bélgica, que ilegaliza por racista al primer partido político de Flandes, esta formación independentista y de ultraderecha intenta refundarse a toda prisa en una nueva organización que conservará las mismas estructuras, la misma cúpula y, posiblemente, su electorado. «Esto no es el fin, sino un nuevo inicio», advirtió Frank Vanhecke, el presidente del partido. El Vlaams Blok es el partido más votado en la región belga de Flandes, donde obtiene uno de cada cuatro votos, aunque el llamado cordón sanitario establecido por las demás fuerzas políticas limita enormemente su poder institucional. Pero ahora será historia, si bien Vanhecke avisa de que crearán «un nuevo Blok con otro nombre, y que será más grande y más fuerte que nunca». El diario conservador valón La libre Belgique incluso avanzó que el nuevo partido se llamará Vlaams Belang (Interés Flamenco) y que será lanzado en un congreso fundacional que se celebrará el próximo domingo. Otros medios especulan con nombres como Vlaams Vrijheidsfront (Frente de Libertades Flamenco) o Vlaamse Liga (Liga Flamenca). En cualquier caso, el nuevo Blok intentará suavizar su ideario racista y xenófobo. Si antes abogaba por expulsar de Bélgica a todos los no europeos, ahora propugnará que éstos respeten las leyes y se adapten a «nuestra cultura y a nuestras normas»