El entrenador de fútbol se convirtió este jueves en el segundo concursante de esta edición expulsado sin haber sido nunca nominado por sus compañeros. Como contraprestación al deseo de Sonia, una cena romántica que disfrutaron ambos, «Gran Hermano» le dió a elegir: cambiar su look o subir directamente a la palestra. Eligió la segunda y acumuló el 63,4 % de los votos de la audiencia, convirtiéndose en el último expulsado del «reality»
07 jun 2013 . Actualizado a las 14:56 h.Gran Hermano 14 despidió este jueves a uno de sus concursantes con más potencial. Muchos le consideraban ganador desde el primer día. Y, al menos dentro de los muros de Guadalix, Kristian contaba hasta esta semana con un sólido apoyo que le colocaba a la cabeza de todos las apuestas para hacerse con el premio de la décimo cuarta edición del reality. Pero el imprevisible Gran Hermano quiso dar una nueva vuelta de tuerca a su recta final. Hace unas semanas introdujo un nuevo sistema de nominaciones: el público, a través de una aplicación móvil, pudo colocar por primera vez en la historia del programa a uno de los concursantes en la lista de nombres expuestos a la expulsión. Hasta ahora, los telespectadores se limitaban a expulsar a los elegidos por los habitantes de la casa. Este innovador procedimiento se tradujo en la nominación de Sonia, que nunca había sido elevada a la palestra por sus compañeros, y en su consecuente expulsión. Si el público nomina, la probabilidad de que saliese su elegido era bastante alta. Y Sonia se despidió del premio.
Su salida fue un golpe bajo para Kristian, que, desde entonces, vivió en la casa de Gran Hermano 14 sus momentos más bajos. La semana pasada, el programa le permitió reencontrarse unos minutos con su chica, que regresó a Guadalix con la misión de cortarle el pelo al madrileño. Una vez allí, el concurso hizo elegir a Kristian entre deshacerse de su característico look y pasar un rato con Sonia o mantener su aspecto y estar directamente nominado. Y eligió la segunda. El pelocho completó la lista de candidatos a la expulsión por decisión de la dirección -que saldó así la contraprestación del deseo que había pedido Sonia durante su estancia en la casa- y no por acumulación de nominaciones. Este jueves en el plató de Gran Hermano, Mercedes Milá anunció al arrancar la gala que la carta de salida se jugaba solo entre dos concursantes: Kristian y, de nuevo, Igor. Salió Kristian con el 63,4 % de los votos. ¿Propició la expulsión de Sonia y la polémica que envolvió la salida de la canaria la decisión de los telespectadores? ¿Es injusto que el madrileño, sin haber sido apuntado por los habitantes de la casa, haya sido nominado obligatoriamente como contraprestación a la petición al genio de los deseos de Sonia?
Como ya es habitual, Gran Hermano 14 sometió al madrileño a un cara a cara con Igor en la sala de expulsiones, después de dejar fuera del duelo a los otros dos nominados, Desi y Nacho. Por tercera vez consecutiva fue el concursante vasco el que salió victorioso del enfrentamiento, que se convirtió en el principal trending topic de la noche en España bajo el hashtag #ghduelo3.
«Gran Hermano 14» acelera
Gran Hermano deberá cambiar de marcha si quiere dar por concluida su décimo cuarta edición antes de que arranque la Copa de Confederaciones que emitirá Cuatro, la cadena hermana de Telecinco, a partir del 15 de junio. Hace unas semanas, Telecinco anunció que aceleraría el ritmo del debate, doblando su emisión semanal, que pasó a copar tres de las noches de la cadena si tenemos en cuenta el debate que presenta Frank Blanco los martes. Sin embargo, el empacho de Gran Hermano 14 solo duró una semana. La semana pasada, Mercedes Milá adelantó que el concurso prescindiría de su gala de los lunes para volver de nuevo unicamente a los jueves. El caso es que, a una semana de la competición deportiva con la que Mediaset está evitando que se solape Gran Hermano 14, la casa de Guadalix acoge todavía bajo su techo a siete concursantes. ¿Cómo solucionará Telecinco la falta de tiempo? ¿Echará el reality a varios concursantes por gala? ¿Se elegirá al ganador definitivo de Gran Hermano 14 entre más de tres concursantes?
En la gala de ayer, la número 19 de este Gran Hermano 14, la presentadora confirmó que el programa entra ya en su recta final: «Habrá un expulsado por las nominaciones, pero no será el único».
Además de la expulsión de Kristian, Gran Hermano 14 se cerró anoche con nuevas nominaciónes. Para no cambiar las costumbres, los elegidos fueron Nacho y Desi, a los que se sumaron Susana y Juan Carlos. Se salvan esta semana Raky, que se derrumbó por completo tras la expulsión de Kristian, Álvaro e Igor, todo un habitual de la cuerda floja.
La audiencia decidió hace tiempo que Igor no se merecía seguir en la carrera hacia el premio final, sin embargo, cuando Gran Hermano 14 abrió la veda de la repesca, los telespectadores, hambrientos de polémica, cambiaron de opinión y reengancharon al vasco, que entró prometiendo gresca con Sonia, de nuevo en el concurso. Igor entró y venció a la canaria. Inmediatamente, el público, aprovechando el nuevo sistema de nominaciones a través de la aplicación oficial del programa, nominó a Sonia y subió a ambos a la palestra. El resultado: la chica de Kristian en la calle e Igor en la casa. A la semana siguiente, el vasco se vió las caras con los gemelos andaluces en un nuevo duelo del que también salió vencedor. La historia se repitió este jueves frente a Kristian.
Una semana difícil para Kristian
A persar de que Kristian siempre se ha caracterizado por su caracter tranquilo y pacífico -solo alterado por las ocasionales discusiones de pareja con Sonia-, en su semana más crítica el pelocho está viviendo algunos de sus momentos más difíciles de su paso por Gran Hermano 14. Las diferencias con Susana son cada vez más evidentes. Unos nuevos gritos procedentes de fuera de la casa -es habitual en este Gran Hermano 14 que los concursantes vean alterada su rutina por las informaciones que les llegan del exterior a través de esta vía- que acusaban a la joven de «falsa» han sido el nuevo resorte que ha disparado una discusión más entre ambos. Susana, tras las palabras con Kristian, ha acudido al confesionario para acusarlo de haberse reído de ella.
Álvaro, pollito volador, por su parte, ha querido dejarle las cosas claras al nominado por lo que pueda pasar esta noche. En un arranque de sinceridad, el concursante accidentado de Gran Hermano 14 le ha confesado a Kristian todo lo que no le gusta de su actitud y de su manera de hacer las cosas: su acusación a Susana, su amistad con los gemelos, su implicación en el episodio del fuet desaparecido y su inseguridad en sí mismo.
Una vez en el plató de Gran Hermano 14 y de haber visionado los vídeos de sus altercados y su paso por la casa, Kristian se disculpó sinceramente con Susana en el momento de la despedida. También recalcó ante Mercedes Milá que no culpa a Sonia de su expulsión, aclaró su relación con los gemelos y confesó su amor por la canaria.
Desi carga contra Igor
A la tensión que, con la gran final a la vuelta de la esquina se respira en la casa de Gran Hermano 14, se le sumó esta semana la inapropiada actitud de y el tinglado que montó ante las valoraciones de sus compañeros sobre su predisposición en la clase de zumba. «Vergüenza le tenía que dar sabiendo que no le quería nadie haber entrado en la repesca -cargó la concursante transexual de Gran Hermano 14 contra Igor después de que el vasco, cansado de su vagancia, opinase que había estado «foja» en los ejercicios-. La próxima vez que tenga algo a mano se lo tiro a la cabeza».
Desi e Igor nunca han mantenido una buena relación, pero esta semana la andaluza se quedó a gusto: «El tío mierda que tiene la gracia en el culo, desgraciao, más feo que un bujero, no ha valido ni para mantener ni a la mujer ni al hijo 8 (...) Le he dicho al súper que si hay la posibilidad de salir de esta casa sin pagar un duro... Ojalá se vaya el Igor a chuparla, España por Dios sacarlo». Antes estas duras palabras, el resto de concursantes de Gran Hermano 14 intentaron que Desi rebajase el tono, ante lo que ella respondió: «Si yo estoy fuera ya le hubiera dado con la botella de zumba en la cabeza, ¡pero de canto!».