Galicia, pendiente del vórtice polar

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

HISTORIAS DEL TIEMPO

Xavier Fonseca

Cuando se produce un evento de este tipo los centros de acción, borrascas y anticiclones, cambian de forma drástica, formándose centros de altas presiones en latitudes altas y descensos de masas de aire frío en latitudes más bajas

15 feb 2018 . Actualizado a las 12:45 h.

Este jueves las lluvias volverán a ser abundantes en el oeste de la comunidad. Se ha activado un aviso en la provincia de Pontevedra por acumulaciones de cuarenta litros por metro cuadrado en doce horas. También hay alerta naranja en la costa por olas superiores a los seis metros. La configuración actual sitúa el anticiclón retirado hacia el sur y la borrasca sobre Islandia. Este es el principal escenario en el que las bajas presiones pueden afectar a Galicia. Lo hacen a través de los frentes y el mar de fondo.

Otra posibilidad es que el anticiclón se desplace hacia Escandinavia y las borrascas desciendan en latitud. En esta situación, pasan muy cerca de Galicia y además de precipitaciones intensas aumenta la fuerza del viento en la comunidad. Este último podría convertirse en la tónica atmosférica durante la segunda mitad del mes como consecuencia del actual calentamiento súbito de la estratosfera y la posterior rotura del vórtice polar. «Ante un evento de este tipo, la estratosfera se vuelve impredecible aunque es cierto que existen patrones en superficie típicos asociados a los calentamientos súbitos estratosféricos, en particular a los eventos tipo ruptura de vórtice polar, como es en este caso», explica la investigadora gallega Froila M. Palmeiro. «Cuando esto sucede los centros de acción, borrascas y anticiclones, cambian de forma drástica, formándose centros de altas presiones en latitudes altas y descensos de masas de aire frío en latitudes más bajas. Esto parece bastante probable que suceda a medio plazo, con importantes pulsaciones de aire frío e inestabilidad sobre Galicia durante las próximas semanas», apunta Rubén Vázquez, de Iberomet. Si se cumple esta previsión, los temporales estarían asegurados.

Otra posibilidad que contemplan los modelos pasaría por una circulación retrógrada del aire. Es decir, se movería del este hacia el oeste, al contrario de la circulación general de la atmósfera. «El presente evento de calentamiento súbito estratosférico supone un récord de flujo de calor, que podría dejar temperaturas de récord en esta zona de la atmósfera y una reversión de los vientos zonales, de oeste a este, que también podría ser histórica», añade Vázquez.

En este otro escenario se formaría un corredor de aire polar continental. Las altas presiones seguirían localizadas sobre Noruega y las bajas en el Mediterráneo. «Este pronóstico coincide a grandes rasgos con el modelo del Centro Europeo, operativo en Aemet, para la próxima semana, tanto desde un punto de vista determinista como probabilístico. Habría una situación anticiclónica en el norte de Europa y una anomalía seca y fría en el noroeste de la Península. El fin de semana veremos la tendencia para lo que queda de mes», señala Francisco Infante, delegado de la Aemet en Galicia.