«Su celtismo pone los pelos de punta»

ZONA CELESTE

Oscar Vázquez

Todos los estamentos del Celta arropan a los 25 socios que cumplieron 50 años como abonados

12 may 2016 . Actualizado a las 10:46 h.

«Tienen ustedes mucho mérito. ¡No es fácil aguantar 50 años a estos cabrones!». Con humor y mirando a sus cuatro capitanes comenzó Eduardo Berizzo su felicitación a los 25 celtistas que este miércoles recogieron la insignia de oro del club en reconocimiento a su medio siglo como abonados. La emoción fue la tónica predominante en un acto muy esperado.

Con la presencia de representantes de todos los estamentos del club -«fijaos la importancia que os damos, como el ejemplo de lealtad y fidelidad», señaló Mouriño-, los aficionados, rodeados de sus familias, recibieron el tributo del Celta. «Ahora siento que formo parte de la historia de mi club. Me vienen tantos recuerdos a la cabeza de nuestro equipo...», comentaba Juan Tizón, de 66 años. El primero, una alineación: «Padrón, Quinocho, Villar, Seoane, Marín, Toni, Gaitos, Olmedo, Mauro, Moll y Braga. No sé el año, pero la tengo grabada», proclamaba orgulloso este celtista que, como los 25, inculcó su pasión a su familia.

Y muchos de esos parientes tampoco se perdieron la cita, como Aitor, de 14 años. «¡Ahora tengo un abuelo famoso! Si él se emociona, yo también. Ya llevo seis años de socio y ojalá pueda hacer tantos como él o más», anhelaba al lado de Plácido Argibay, de 65 años. «Soy socio desde los 15. También fui recogepelotas, jugué en el juvenil... Estaba deseando que llegara este momento y estoy muy emocionado», relataba casi entre lágrimas.

También muy conmovida, Libertad Carvajal aplaudía a su marido, Modesto Bermúdez. «Siempre tuvo pena porque fue árbitro y 20 años no pudo ser socio. Pero aun así consiguió llegar a los 50, que era una ilusión enorme que tenía». Casados desde el 57 y tras diez años de novios, a ella nunca le contagió: «No hubo manera. No me gusta el fútbol. Pero me encanta cómo sonríe y cómo está disfrutando», decía con la misma sonrisa.

«¡Nolito, suelta antes el balón!»

Hubo quien aprovechó el momento de la recogida para proclamar un «¡Hala Celta!» e incluso para dirigirse a Nolito al oído, lo que provocó las carcajadas del gaditano y de Sergio. Quien lo hizo fue José Fernández, de 84 años, que revelaba luego la confidencia: «Que no se agarre tanto al balón, ¡que lo tiene que soltar antes!». El sanluqueño fue uno de los más solicitados para fotos y autógrafos. Entre sus admiradores, Borja Golpe, de 7 años, nieto de Isidro Rápela y que acudió al acto con la camiseta del 10 puesta. «Aún no soy socio, pero sí que voy a veces a Balaídos con el abuelo. Hoy estamos los dos muy contentos».

Para todos los presentes, el momento disfrutado ayer era muy esperado. Pero hubo quienes no llegaron a vivirlo, como Francisco Cascallar, representado por su viuda, Pili, y su hermano, Joaquín. «A mí me quedan dos años para tener la mía -señala el menor de los hermanos-. Es una pena que él no pueda vivir esto, porque era un celtista de corazón».

Y le interrumpía su hija: «Y él también. Pagó el abono con sacrificio, haciendo veladas y estuvo ahí cuando iban cuatro. Le dio un infarto saliendo de Balaídos y el médico no le prohibió fumar, le dijo que rompiera el carné». Él se negó y se salió con la suya. Hasta alcanzar los 50 años y subiendo. Una historia celeste como las 25 que coincidieron ayer en el escenario de una parte una parte sin la que sus vidas no hubieran sido las mismas.

Berizzo promete entre risas a los socios históricos «hacer los cambios antes»

El técnico del Celta, Eduardo Berizzo, no quiso dejar pasar la oportunidad de dirigirse a los socios históricos. Comenzó con humor -asegurando que le tocaba hablar a él porque Nolito no se atrevía-, pero acabó tirando de emociones. «Los que están aquí es porque tienen un sentimiento hacia el club que contagiaron y seguirán contagiando», comenzaba, siendo interrumpido por un aficionado al que de inmediato daba la razón.

«Exacto, sienten amor por esta camiseta. La camiseta es lo realmente valioso en esto del fútbol», añadió. Y antes de desearles «quinientos años más a todos», tuvo tiempo para un agradecimiento y una promesa: «Gracias por todos estos años: por apoyar, por criticar... ¡Les prometo hacer los cambios un poco antes!», soltó ante la carcajada generalizada.

«Habéis marcado el camino»

El presidente Mouriño también agradeció a los abonados «50 años ininterrumpidos de celtismo, de estar ahí permanentemente, animando y criticando», porque así, agregó, hacen al club mejor. «Hay una gran coincidencia, y es que cumplimos 50 años en Primera. No tenemos cien por la fusión, pero con Vigo y Sporting sí son más de cien años de los que os corresponden la mitad, o incluso más».

«Con el Celta sonreísteis y os cabreasteis. Esos sois vosotros y no nos queda más que aprender de esa lealtad y esa fidelidad». Algo que ejemplificó también recordando cómo algunos familiares de celtistas fallecidos siguen abonando el carné. «Es increíble, pone los pelos de punta. Da ánimo y coraje para decir: 'Esto es el Celta, es un gran sentimiento, coraje, pasión'. Podemos perder partidos, pero nunca nos van a vencer porque nos habéis marcado el camino. Como mínimo, 50 años».