Giráldez no esconde que su equipo no está al mejor nivel, aunque ahora gane
04 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Hace un mes, el Celta atravesaba una buena racha de juego, pero le faltaban los resultados. Ahora, ha logrado tranquilidad tanto en la liga como en Europa, pero necesita recuperar el juego, una reválida para una semana en la que le esperan dos duelos de primer nivel, ya que el jueves visita al Dinamo de Zagreb, invicto en Europa y segundo en su liga, y el domingo espera en Balaídos a un Barcelona obligado a mantener el paso del Real Madrid en la liga.
Giráldez no esconde que su equipo no está al mejor nivel, aunque ahora gane. «Desde la victoria, se construye mejor. No miro la clasificación a estas alturas, ni antes ni ahora. Hay que seguir por este camino en cuanto a unión, aportación de inicio y banquillo y mejorar el nivel individual, ser más continuos y que lo que pase en el partido no nos desestabilice», comentaba tras ganar al Levante, considerando positivo no tener «la urgencia de ganar que había la semana pasada».
En ese contexto, los vigueses afrontan el jueves (18.45 horas) la cuarta jornada de la fase liga de la Europa League ante un rival que busca la clasificación directa para la segunda fase. Pendientes de Andrei Radu y de Wiilliot Swedberg, Claudio Giráldez cuenta con casi todo el plantel -Javi Rueda está descartado- y podrá aplicar la política de rotaciones. Para la línea defensiva, están descansados Manu Fernández y Mihailo Ristic, y Carlos Domínguez solo jugó la última media hora en Valencia. En la sala de máquinas Damián no tuvo minutos y Miguel Román y Hug Sotelo entraron en la recta final, y entre los tres deberían estar el doble pivote. En los carriles, a Claudio no le abundan las alternativas más allá de Jones El-Abdellaoui, Franco Cervi o Hugo Álvarez y de cara al ataque, el más fresco es Pablo Durán.
Está por ver si el técnico decide apostar de inicio por Iago Aspas o intenta guardarlo de cara a la visita del Barcelona, un encuentro que se puede amoldar más a sus características. La lógica invita a pensar que el domingo jugarán ante los de Flick los futbolistas que estén más frescos y con menos carga de minutos. Los célticos tienen ahora la asignatura de ganar como locales en la liga.