
Jugador y club hicieron un esfuerzo para llegar a un acuerdo económico
16 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Celta e Ilaix Moriba querían entenderse a toda costa y, aunque apuraron el plazo hasta el último día, finalmente se produjo el acuerdo esperado: el conjunto vigués hizo uso de la cláusula de opción de compra pagando al Leipzig los seis millones estipulados (de los que 600.000 euros son para el Barcelona) y alcanzó un acuerdo con el jugador para firmarle un contrato por cuatro temporadas, hasta el 30 de junio del 2029. El centrocampista guineano hizo un esfuerzo para adaptar su salario a las posibilidades económicas de un conjunto vigués que también apostó fuerte por su continuidad. Para que el acuerdo fuese posible, el futbolista aceptó variar las condiciones económicas que aparecían en la propia opción de compra.
El Celta oficializó el fichaje pasadas las nueve de la noche de ayer, a poco más de tres horas de que expirase el plazo. «Quédase!» fue el encabezado del anuncio: «O Celta exerce a opción de compra acordada o pasado verán co RB Leipzig e pecha a súa segunda fichaxe para a próxima tempada, o centrocampista Ilaix Moriba. Tanto a entidade celeste como o propio xogador fan un gran esforzo para asegurar a súa continuidade no equipo», añadiendo también que «a súa intelixente toma de decisións converteuno nunha peza clave no estilo de xogo característico do conxunto de Claudio Giráldez».
Desde el día después de la celebración por la conquista de la plaza europea, la continuidad de Ilaix Moriba en Vigo se había convertido en objetivo prioritario. El Celta disponía de tres semanas para anunciar si utilizaría la cláusula de la opción de compra para quedarse con el jugador en propiedad y, al mismo tiempo, llegar a un acuerdo con el centrocampista en materia de salario. Porque aunque en el contrato estaban estipuladas las cantidades (seis millones al Leipzig y el sueldo del jugador), el club necesitaba negociar a la baja la nómina del guineano para que tuviera cabida dentro de su tope salarial, asunto que se dilató hasta el último día.
De hecho, a lo largo de la semana pasada, en el Celta mostraban sus dudas sobre la posibilidad de cerrar el fichaje mientras en la otra parte de la trinchera se destacaba el esfuerzo que estaba haciendo Ilaix por su firme deseo de repetir en Vigo, donde recuperó su mejor versión, la misma que le había encumbrado en su primera temporada en el Barcelona. Luego llegó el millonario traspaso al Leipzig por 16 millones de euros más seis en variables y un peregrinaje de cesiones por la liga española, la misma fórmula con la que llegó a Vigo, aunque a orillas del Atlántico todo fue diferente.
Giráldez siempre se deshizo en elogios a un jugador que no había terminado de encontrar su sitio. En su presentación, de hecho, comentó que tenía el propósito de demostrar que seguía teniendo el fútbol que todo el mundo le había conocido. El porriñés, que dejó claro que quería seguir contando con él. También el directo de fútbol del club, Marco Garcés, se mostraba optimista hace uno días, cuando revelaba que ya tenían decidido pagar la opción de compra de seis millones, como así sucederá finalmente. Ilaix, de 22 años, terminó la temporada con sus mejores números como profesional: 2.129 minutos en 33 partidos, 22 como titular, y reencontrándose con el gol cuatro temporadas después, ante el Sevilla. Además, encajó a la perfección en el vestuario.
Elenco para el doble pivote
Con la continuidad de Ilaix, el Celta cuenta en nómina en estos momentos con los cuatro mismos mediocentros de la temporada pasada: Beltrán tiene un año más de contrato en vigor y tanto Damián Rodríguez como Hugo Sotelo cuentan con acuerdos de larga duración. Además, Miguel Román hará la pretemporada con el primer equipo y podría ser miembro de la plantilla a todos los efectos aunque mantenga la ficha del filial. En el caso de Sotelo, se ha deslizado el interés de varios conjuntos italianos por hacerse con los servicios del canterano celeste.