El capitán del Celta es un jugador especial para todo
21 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Hablar de Iago Aspas es hablar de un jugador especial para todo en el Celta, hasta para la manera de renovar, porque, de hecho, el club dice que cuando él quiera. La apuesta por la continuidad de Aspas creo que significa consolidar la idea que tiene este entrenador, que quiere que todo funcione alrededor de esa idea y Iago, en ese contexto, es un gran pilar, está rindiendo bien. Yo lo renovaría sin pensarlo, porque creo que para el contexto de un año sí que se le puede hacer la propuesta.
Iago es un enamorado del fútbol. Lo vi peor la temporada pasada, cuando no le favorecía la manera de jugar que tenía Benítez. Eso sí, creo que se deben hacer contratos de año a año y que vaya decidiendo en función de cómo se encuentre. Si no, la competición lo irá avisando.
Creo, además, que con todos los avances que hay, es mucho más fácil dilatar la vida deportiva de los jugadores. En mis tiempos, con 32 años, nos jubilaban, pero ahora cambió mucho la alimentación, la recuperación que tienen, la manera de trabajar a nivel físico y, además, Iago se fue adaptando y se sabe mover en este Celta a la perfección. Para mí es un estilo Messi.
Porque en la actualidad los movimientos de Iago son más reducidos, pero cuando tiene el balón, le da velocidad y, por supuesto, sigue teniendo último pase y visión de juego. Creo que cuando un jugador va perdiendo facultades físicas, va entendiendo más el juego si quieres durar más, y eso es algo que hace el 10 a la perfección.
Por otra parte, el capitán está disfrutando con el fútbol en un Celta que en casa se hace respetar y los rivales ya llegan a Balaídos condicionados, pero a domicilio es otra historia. A estas alturas está clara la idea de fútbol de Claudio, con una apuesta ofensiva, pero es la competición la que te pone en tu sitio y hasta la fecha, el Celta marca goles, pero también encaja bastantes. A veces, cuando tienes que correr tanto hacia atrás, es que tienes algún problema en el posicionamiento; el céltico es vivir en campo contrario, y para eso hay que tener a los jugadores que estén por detrás de la pelota para salir al corte.
Creo que Giráldez tendrá que encontrar un equilibrio intermedio, que por momentos ya no está consiguiendo, y seguro que en Bilbao veremos algo diferente.