Una camiseta de Iván Villar para hacer feliz a Diego

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

El portero de Aldán cumplió en Villarreal el sueño de un seguidor suyo con discapacidad intelectual y física

29 ago 2024 . Actualizado a las 08:27 h.

Diego Barrachina Vivar tiene 37 años, es de Castellón de la Plana, tiene discapacidad intelectual y física sigue desde hace años la carrera de Iván Villar. También llevaba años intentando conseguir su camiseta. En los días previos al partido de este lunes entre Celta y Villarreal, contactó tanto con el club como con la agencia de representación del futbolista y entre todos, hicieron realidad su sueño, cuenta feliz.

«Siempre he seguido su trayectoria, desde que debutó en el 2017», dice este chico que se siente identificado con «lo mucho que ha tenido que luchar» el portero celeste, pues él tampoco lo ha tenido fácil con las circunstancias con las que le ha tocado lidiar en su vida. «Hay gente del Celta por redes sociales que no es justa con él. Es un hombre de la casa, canterano, gallego y celtista de corazón y no merece ese trato», argumenta. Por eso le escribió quiso compartir con él las dificultades por las que ha pasado, además de pedirle la camiseta.

Barrachina agradece especialmente el gesto de Iván después de cómo fue el desenlace del partido. «Estaban tristes, jodidos y fastidiados cuando fueron a agradecer a la afición», relata. Temía que en ese escenario, se olvidara de la camiseta pendiente, pero ahí estaba Vlado Gudelj para recordárselo. «Él se lo dijo, se quitó la camiseta, se acercó y me la dio. Luego, fuera del estadio, fue de los primeros en salir, se acercó a firmar y hacerse fotos y ahí me he podido hacer la foto con él y con la camiseta», cuenta. También se pudo inmortalizar junto a Claudio Giráldez y Vicente Guaita, para completar la alegría dentro de la decepción dde la derrota.

Diego recordará este duelo como «un partido loco, con goles, emociones, nervios, fallos, balones al palo y los porteros como protagonistas», especialmente un Iván que detuvo un penalti en el descuento, con el infortunio de que el rechace sí entró. «Fue un gran partido. Les di ánimos -a Iván y a Giráldez- y les dije que para mí son candidatos a jugar en Europa, que van a ser uno de los equipos revelación».

En el mensaje enviado los días previos al partido, Diego les daba sus datos de contacto, explicaba dónde iba a estar situado en el campo y detallaba su complicada historia personal, con minusvalía psíquica y física, acoso escolar en su infancia, dificultades económicas por el desempleo en su familia y un grave problema de salud de su madre como obstáculos a los que ha tenido que hacer frente. Sin embargo, las ha ido superando, trabaja en un hipermercado desde hace trece años y desde el lunes tiene un nuevo sueño cumplido.