El argentino tiene la cláusula más alta de un entrenador en el club, que en noviembre del 2020 pagó 1,3 millones de euros al Internacional
12 may 2022 . Actualizado a las 21:23 h.
El pasado miércoles se aludía en Chile a los problemas económicos que se encontraría la ANFP para hacerse con los servicios de Eduardo Coudet como nuevo seleccionador. Una declaración de intenciones que tiene una fácil concreción al otro lado del Atlántico: para brindarlo, el Celta le puso la cláusula de rescisión más alta de la historia del club, muy por encima de sus predecesores, que siempre tenían una vía de escape de lo más asequible en términos económicos. Todo lo contrario que Coudet, cuyo equipo o selección de destino tendría que hacer frente a un importante desembolso para romper los dos años que tiene de contrato con el conjunto vigués, que mantiene su fe ciega en el argentino.
Hay que tener en cuenta que el Celta, en noviembre del 2020, cuando fue a buscar al Chacho, tuvo que pagar una cantidad para rescindir con el Internacional de Porto Alegre. Según trascendió en Brasil, fueron unos 10 millones de reales (unos 1,3 millones de euros). La cantidad que a renglón seguido le colocó el Celta tras firmar su contrato en Vigo fue mucho mayor.
En lo deportivo, el Celta parece no tener duda con el Chacho, que firmó una excelente campaña el curso pasado, pasando de colista a octavo clasificado, y que este curso, muy irregular, aseguró el aprobado con antelación. Durante este tiempo, tuvo una influencia jamás conocida por un entrenador en el Celta en materia de fichajes. Ahora, ya ha iniciado la planificación del próximo proyecto en compañía de Luís Campos, el nuevo director deportivo (aunque externo) que sigue sin ser presentado.