La encrucijada legal que afronta el Celta si quiere despedir a Santi Mina

GRADA DE RÍO

CARLA CORTÉS

La legislación laboral avala los derechos del futbolista mientras no exista una condena firme y los expertos pronostican una salida pactada entre las partes

05 may 2022 . Actualizado a las 20:56 h.

Santi Mina no vestirá la camiseta del Celta en las cuatro jornadas que restan, pero el club no ha aclarado cuáles son sus intenciones respecto al contrato que une a ambas partes hasta junio del 2024.

¿Está legitimado el Celta para despedir al jugador por esta sentencia?

No, con el Estatuto del Trabajador en la mano. No prevé expresamente el despido por una sentencia, aunque implique el ingreso en prisión, cuando no es firme. «En el artículo 45.1.g sí se contempla la suspensión del contrato —que no la extinción— si se decreta la privación de libertad provisional aunque la sentencia no sea firme, algo que no se ha producido hasta la fecha», aclara el abogado especialista en derecho deportivo, Yago Casal.

¿Puede el club iniciar el procedimiento para rescindir el contrato?

Sí, como cualquier empresa con cualquier trabajador, pero se arriesga a una demanda por un despido improcedente. Según varios expertos consultados por La Voz, el club podría alegar el evidente daño y menoscabo de su imagen y sus intereses, pero la legislación laboral avalaría los derechos del futbolista. La presunción de inocencia no se agota con una sentencia de primera instancia, sino con la finalización del procedimiento y la firmeza de la sentencia, por lo que la situación disciplinaria, atendiendo al derecho laboral, no habría variado para Mina.

¿Puede acogerse el Celta a alguna cláusula para justificar la rescisión?

El club conocía la denuncia contra el futbolista en el momento que firmó su contrato en el 2019 y pudo incluir en su contrato alguna cláusula al respecto. «Aunque el Celta lo hubiese hecho, en previsión de una hipotética sentencia condenatoria, este pacto podría ser considerado nulo por la magistratura en caso de un conflicto judicial si se aplica en este punto procesal, al vulnerar el derecho del trabajador a una tutela judicial efectiva —la que recoge también el derecho a la presunción de inocencia— y que considera que el procedimiento no está finalizado hasta que la sentencia judicial sea firme», añade uno de los especialistas, conocedor del caso.

¿De qué manera podría resolverse la situación entre las partes?

Los profesionales consultados por La Voz concluyen que la solución que se tome será acordada entre el Celta y los representantes legales de Santi Mina. «Es evidente que hay un daño para el club, y lo lógico es que ambas partes pacten una solución. Una opción sería acordar la rescisión definitiva del contrato y las cantidades a percibir, incluso vistiendo luego la decisión públicamente de despido, aunque a efectos legales no sería tal», apunta uno de los expertos. «Otra opción que puede contemplarse, teniendo en cuenta que Mina es todavía un activo del club, podría ser alejar completamente al futbolista del foco mediático y de la disciplina del Celta y cederlo a un club extranjero, en Arabia o en Asia por ejemplo, para que esté tranquilo mientras se resuelve su situación procesal. El jugador también será el primer interesado ahora mismo en no exponerse al público mientras la situación sea esta», añade otro abogado, experto en derecho laboral y deportivo.