El joven, de 24 años, contó en Twitter que tenía un 10 % de posibilidades de sobrevivir a una operación y se muestra abrumado por los mensajes recibidos, incluido el de Fran Beltrán
24 ene 2022 . Actualizado a las 21:36 h.En el primer partido del Celta en el 2022 en Balaídos, la victoria frente a Osasuna del pasado día 19, el asiento del abonado del club vigués Óscar Román Figueroa estaba vacío. «Día 16 ingresado, tres operaciones (de momento), un 10 % posibilidades de sobrevivir y aquí estamos, he esquivado una buena bala», escribía en Twitter hace un par de días. Añadía que ha vuelto a nacer y que le espera una «larga recuperación».
En las horas posteriores, la oleada de mensajes no ha cesado, incluidos el del futbolista céltico Fran Beltrán; el director de la cantera, Carlos Hugo García Bayón; muchos otros celtistas y peñas y también usuarios de esta red social que no tienen que ver con el equipo ni conocen a Óscar en persona. Pero el caso es que su mensaje ha calado, especialmente viniendo de un chico de 24 años. «Estoy abrumado con tanto apoyo», cuenta hoy desde el hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, donde permanece ingresado desde el 7 de enero.
Óscar aún no tiene el diagnóstico final. Pensaban que era apendicitis, pero al hacerle pruebas no encontraban el apéndice y detectaron «líquidos extraños en el intestino, todo muy raro y difuso», detalla. Acabó siendo operado de urgencia tras pasar un «dolor terrible». Al día siguiente, perdía mucha sangre y tuvo que ser intervenido de nuevo. Dos días más tarde, el tercer paso por quirófano. En este proceso le han «quitado buena parte del intestino». Ahora está mejor, pero a la espera de noticias y saboreando el cariño que está recibiendo. «No era una persona muy fuerte mentalmente, pero intentaré que todo este apoyo me empuje hacia adelante», comenta. De hecho, ya esta haciendo progresos: «Hoy comienzo dieta líquida. Paciencia y paciencia».
Pasar por este importante contratiempo de salud le ha supuesto un vuelco radical. «Por cosas como esta, te cambia la perspectiva de ver la vida, estoy destrozado pero vivo, que es lo importante», subraya. No se esperaba tantas muestras de apoyo y agradece que está siendo «súper bonito», en especial por parte del celtismo, la afición de la que forma parte. «Recibir un mensaje de Fran Beltrán fue increíble, pero cada muestra de apoyo es un plus anímico muy grande», destaca.
Seguidor del Celta desde siempre, un amigo le animó a abonarse en la temporada de A Nosa Reconquista -a raíz de lo vivido y su 10 %, algunos celtistas le recordaban en sus mensajes la salvación agónica anterior a esa, la del 4 %- y desde entonces, ha sido habitual de Balaídos. «Estando ingresado me perdí la victoria contra el Osasuna y el empate contra el Sevilla. Pero a partir de ahora lo seguiré ya desde el móvil hasta que me den el alta, que espero que sea pronto», cuenta.
Román destaca que «no buscaba nada con el tuit» más allá de expresar lo que sentía y lo que le había pasado. «No me esperaba para nada esto. Es una pasada todo», reitera. Como lo es que haya podido sobrevivir, aunque admite que fue a posteriori cuando supo hasta qué punto había llegado a ser grave su situación. «Lo iba intuyendo por la preocupación de los médicos. Me decían que iban a hacer todo lo posible, que estuviera tranquilo. Al subir a planta de nuevo, se alegraron muchísimo las enfermeras al verme».
Precisamente, el joven celtista agradece de manera especial el trato recibido por parte del personal sanitario. «El trato de los enfermeros, médicos... Increíble, un gustazo. Muy buenas personas», cuenta. También lo reflejó en Twitter: «Que viva la sanidad pública siempre». Y un celtismo que se ha volcado con él y que ya le pide al club «un gesto cuando vuelva a Balaídos».