Los vigueses, ante la oportunidad de asentarse en la zona cómoda de la tabla si le dan continuidad al triunfo de Vitoria con Cervi como novedad ante el Valencia
05 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La Liga es una carrera de fondo. El Valencia comenzó el campeonato con un impresionante esprint y el Celta lo hizo en el pelotón de los rezagados lastrado por unos pésimos resultados como local. Sin embargo, 16 jornadas después, el equipo de Coudet puede darle caza a la tropa de Bordalás si es capaz de ganar en Balaídos, el gran asunto pendiente para los celestes.
Porque el Celta confirmó en Mendizorrotza su peligrosidad a domicilio firmando su tercer triunfo lejos de casa (lleva 11 puntos como visitante), pero esa victoria necesita de un refrendo en casa. Coudet dice que no hay fantasmas en Balaídos y sí muchas ganas de volver a ganar (el único triunfo, ante el Granada, data del 27 de septiembre ante el Granada).
Desde entonces, dos derrotas (Sevilla y Real Sociedad) y dos empates (Barcelona y Villarreal), en ambos casos yendo por detrás en el marcador. El celtismo solo ha visto a los suyos por delante en el luminoso un minuto en ocho partidos como local: el tiempo que transcurrió entre el gol de Denis al Granada y el pitido final.
Frente al Valencia, un histórico que trata de recuperar el paso perdido con Bordalás al frente, los vigueses insistirán en su idea esperando que la definición que apareció a domicilio tenga continuidad a orillas del Atlántico. Coudet sabe del orden de los equipos de Bordalás y de cómo tapa los pasillos el madrileño, pero su equipo tiene argumentos como la presión alta o la velocidad de balón que, de ser efectivas, le abrirán caminos cara el gol. Un triunfo significaría comenzar a estabilizar al equipo.
Con respecto al once de Vitoria, el único cambio podría estar en el flanco izquierdo de las medias puntas con Cervi relevando a Nolito. El argentino atraviesa un buen momento y Coudet quiere recuperarlo para la causa.
Si el exBenfica es la única novedad Murillo y Tapia irían al banquillo por segunda vez consecutiva, lo que resulta todavía más novedoso, porque hasta hace nada eran dos intocables del Chacho. Algo parecido sucede con Hugo Mallo si al final está en la lista de los suplentes.
El gran problema del Celta en cuanto a hombres es la falta de un delantero de repuesto, ya que la lesión de Thiago Galhardo a los vigueses sin su tercer, y último, ariete en la plantilla. Un problema para un equipo que siempre juega con dos delanteros.
El Valencia llega con bajas en defensa al estar sancionados Dimitri Foulquier y Mouctar Diakhab. Tampoco están disponibles Correia y Gabriel Paulista por lesión, lo que merma de un modo considerable su flanco derecho.