El partido frente al Celta será el primero de Quique Sánchez Flores ante la afición azulona en esta tercera etapa al frente del Getafe. «Estoy con ganas porque han sido dos etapas buenas y lo afronto con mucho cariño y naturalidad. Estos chicos me hacen sentirme entrenador otra vez y las emociones habrá que contenerlas porque tengo que estar pendiente de lo que pase en el campo», apuntó.
Quique habló sobre Darío Poveda, que llegó al Getafe la pasada temporada pero cuyo rendimiento desde 2019 ha estado lastrado por las continuas lesiones. «Poveda tenía un historial muy prometedor cuando era juvenil, de los mejores delanteros de España y las lesiones lo han frenado. Puede jugar arriba, como mediapunta o como extremo. Queremos que se sienta bien y vaya conociendo varias posiciones para poder jugar en cualquiera de ellas», destacó.