La ilusión del Celta, en cuarentena

x.r.c. VIGO

GRADA DE RÍO

Joaquín de Haro

El plan de desactivación de los rivales, el bajo momento de forma de algunos jugadores y los desajustes en la presión que se pagan atrás, claves del mal inicio

05 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta arrancó la temporada a mediados de agosto desbordando ilusión y soñando en grande, pero ocho jornadas después, cuando el segundo parón liguero hace acto de aparición, todas esas expectativas están en cuarentena. Los vigueses tienen siete puntos, tres sobre la zona de descenso, y más allá de los números, sus sensaciones no son nada buenas. Los rivales han encontrado el modo de desactivarlos, a los célticos les falta frescura para la presión, no gobiernan los partidos y se han convertido en un equipo predecible para sus rivales. Como consecuencia, ya acumula cinco derrotas.

EL ESCENARIO

«Os rivais coñecen ó Celta e desactivan as súas cousas boas»

El factor sorpresa del plan de Coudet pasó a mejor vida hace tiempo y desde el comienzo de curso, los rivales salen más pendientes de neutralizar las virtudes celestes que de fomentar las suyas propias. «O control de partido e dos xogadores non se ve reflectido no campo. Os rivais xa coñecen ó Celta , desactivan as súas cousas boas e aproveitan as debilidades que ten o Celta», comenta José Luis Mosquera, exjugador y entrenador céltico y que pone como ejemplo el sistema del Elche, que desde su prisma igualó el 4-4-2 para tapar las vías de penetración de un equipo que se ha vuelto previsible y que quizás acuse la falta de un plan B.

APORTACIÓN

«Hai xogadores que non están no seu mellor nivel»

Hace tiempo que Eduardo Coudet viene pregonando que hay futbolistas que no están a su mejor nivel, un problema que también detecta Adrián Rubio, el que fue segundo entrenador del Lugo con Juanfran. «Hai xogadores que non están ó seu mellor nivel e iso vese reflectido no rendemento colectivo, non sei se se trata dun problema físico». Para el entrenador vigués, ese punto menor a nivel físico puede ser consecuencia de una dura pretemporada que provoca «que lle estea custando enganchar o ritmo», algo que se ve sobre todo en la presión tras pérdida: «O equipo non vai fisicamente como ía e creo que a nivel táctico o aspecto físico condiciónao moito». Además, sus líneas no están posicionadas al mismo nivel que el curso pasado «e a miña dúbida é se a retrasaron por unha decisión táctica ou física». No obstante, los vigueses están entre los equipos que más corren en la liga según Mosquera. «O malo é que a idea non saia, pero o Celta corre moito máis que os seus contrarios».

POR LÍNEAS

«Para que o Celta funcione, o balón ten que estar nos media puntas»

La línea de tres media puntas es el auténtico termómetro del juego del Celta y esta dista mucho de la mejor versión, la del curso pasado. «Para que o Celta funcione, o balón ten que estar nas medias puntas ou incluso nos puntas», comenta José Luis Mosquera, que ve demasiados riesgos en la tendencia a sacar el balón jugado desde atrás. Con Berizzo, por ejemplo, el juego combinativo comenzaba en la línea de medio campo. Así, de paso, se minimizan riesgos en defensa como el mal despeje que precedió el gol del Elche. Tapia ejercía de central y nadie tapó el ataque.

DEFENSA

«Se o Celta chega tarde á presión, sufre atrás»

Aidoo es el único central rápido que tiene el Celta para jugar a campo abierto y ante la imposibilidad de arroparse atrás, la mejor medicina del Celta para defenderse es la presión tras pérdida. «Se o Celta chega tarde á presión ou ten desaxustes na liña de presión, sufre atrás porque non ten centrais para xogar a campo aberto. Nas transicións ofensivas, os rivais machacan», apunta Adrián Rubio del sistema defensivo.

La salvación como primer objetivo y mantener la confianza como principal premisa

El Celta cerró la temporada pasada a tres puntos de Europa, transmitiendo la idea de que le faltaron un par de jornadas para hacerse con la plaza continental. Este verano mantuvo a los pilares de su plantel y todo invitaba a pensar en un cambio de objetivo, pero a día de hoy, la realidad aconseja prudencia y, del mismo modo, confianza. Además, da la impresión que el equipo transmite tranquilidad y convicción.

EXPECTATIVAS

«A meta principal debe ser salvarse»

El final de temporada pasada, de la mano de Coudet, disparó la ilusión y generó unas expectativas que ahora están en cuarentena. En el escenario actual, la primera premisa debe ser salvarse si renunciar a nada una vez conseguidos los puntos. «A meta principal debe ser salvarse e a partir de aí, se vas sen presión, nas últimas seis ou sete xornadas, ver se tes marxe de puntos para loitar por algo máis». Plantearse un objetivo mayor de inicio mete más presión.

REVERTIR LA SITUACIÓN

Mantener la confianza y resultados positivos

«Se a volta do parón o Celta engancha dous resultados positivos, o de Elxe quedará como un tropezón», dice Adrián Rubio, que pese a las cinco derrotas y los (solo) siete puntos, ve al equipo convencido de sus posibilidades: «A verdade é que non creo que nin o equipo nin os xogadores estean nerviosos, creo que é máis un tema externo que deles», dice.