El polvorín del Alavés: centenario, descenso y guerra civil

GRADA DE RÍO

El equipo de Abelardo recibirá al Celta en medio de un convulso momento interno y tras seis jornadas sin ganar

31 mar 2021 . Actualizado a las 11:01 h.

Los fantasmas en Vitoria vuelan bajo. Y lo hacen desde hace tiempo ya. Tras el controvertido final de la pasada temporada, el Alavés le entregó la nave a Pablo Machín. Duró dieciocho partidos de Liga. Tras perder en Cádiz, y acumular cuatro derrotas en seis jornadas, el soriano fue invitado a marcharse. Dejó al Alavés, que recogió Abelardo en su retorno a Mendizorroza, con dos puntos de margen sobre el descenso. El «Pitu» no pudo intuir peor estreno. Los babazorros fueron ridiculizados por el Almería en la Copa del Rey. «La actitud es innegociable y el otro día hubo jugadores que no la tenían». Tras el 5-0, el técnico disparó su primera lanza al vestuario. No sería la última. Ante el Celta, y tras semanas de mucho revuelo interno, el Alavés, que celebra este año su centenario, se juega una final por la permanencia y un comienzo para apaciguar su dinamitado fuero interno.

En caída libre: Una victoria en diez jornadas con Abelardo en el banquillo.

El despido de Machín no solo no ha supuesto el cambio de tendencia que pretendía la directiva. El Alavés ha ganado un solo partido en lo que va del 2021 —al Valladolid por 1-0— y suma con el técnico asturiano en los nueve restantes siete derrotas y dos empates. De hecho, los vitorianos han perdido cinco de los seis últimos compromisos y sumado un solo punto, en casa frente al Cádiz. Una pésima racha que los ha hundido a la penúltima posición de la tabla, a dos puntos de la permanencia que marca el Elche de Escribá.

Una coladera: Quince goles encajados en sus últimas cinco derrotas

Pese a haber maquillado ligeramente su imagen en su último encuentro en el Metropolitano, en el que cayó por 1-0 y dispuso en botas de Joselu un penalti para igualar en los compases finales, el Alavés muestra una debilidad defensiva más que preocupante en el último tramo de competición. Ha encajado quince tantos en sus últimas cinco derrotas, una media de tres goles por partido.

El calendario: El riesgo de descolgarse antes de afrontar el último mes

El partido ante el Celta cobra mayor trascendencia en Vitoria si atendemos a las próximas jornadas que esperan a los de Abelardo. Tras medirse a los de Coudet, deberán visitar San Mamés, recibir al Villarreal y jugar en Mestalla. Tres jornadas en las que el Elche —que este domingo juega en el Martínez Valero ante el Betis— viajará a Huesca y recibirá al Valladolid y al Levante. Los pucelanos, el siguiente rival a batir para los vascos, marchan ya a cuatro puntos y en esas tres jornadas venideras —en la presente pasarán por el Camp Nou— además de la visita a Elche recibirán en Zorrilla al Granada y al Cádiz. Si no reacciona, el Alavés, que acabará abril midiéndose al Huesca en un partido dramático, puede encontrarse con una losa difícil de levantar.

Cisma en el club: Un comunicado frente a los rumores sobre el vestuario

No es habitual que una entidad salga al paso de rumores sobre su vida interna, pero la que preside Fernández de Trocóniz lo hizo hace dos semanas tras proliferar en redes sociales unos mensajes que describían supuestos conflictos personales muy graves entre varios de sus futbolistas. «El Alavés condena la difusión de informaciones absolutamente interesadas, infundadas y falsas, que en muchos casos incluso exceden del ámbito profesional afectando a aspectos de carácter personal, y que en todo caso cuestionan o intentan sembrar dudas sobre la profesionalidad, honorabilidad, la implicación y el compromiso de los integrantes del club». También Abelardo se pronunció: «La gente que ha generado los rumores no quiere al Alavés». El club no ha concedido entrevistas con sus futbolistas en esta semana previa a enfrentarse al Celta.

Dudas sobre si Abelardo indultará a Lucas Pérez tras reprocharle su actitud

Por si la dinamita en Vitoria no fuera suficiente, la última jornada sirvió también para incendiar la relación entre Abelardo y el gallego Lucas Pérez, ausente en la convocatoria frente al Atlético de Madrid. Preguntado a la conclusión, el técnico no se anduvo con paños calientes. «Te voy ser muy claro. No voy a contestar más preguntas sobre eso, porque no quiero desviar más ese tema. En el Alavés, creo que todos y sobre todo en mi idea, es el valor, el coraje, el compromiso y darlo todo por este club. Quien no quiere darlo pues, evidentemente, no merece entrar en este equipo», se despachó.

El entorno de Lucas Pérez salió al quite tras el palo del preparador asturiano. «Respecto a las acusaciones de falta de compromiso, queremos aclarar que (Lucas Pérez) en ningún momento ha faltado al respeto ni a la honorabilidad del club. En su trayectoria profesional, y representando a varias entidades, nunca se le ha podido tachar de falta de compromiso. Ante la falta de minutos en los dos últimos meses, hay que dejar claro que Lucas siempre ha estado y estará total disposición del entrenador para aportar lo máximo para que el Alavés pueda lograr el objetivo de la permanencia».

En lo que va de marzo, el coruñés estuvo en el banquillo ante el Betis pero no disputó ni un solo minuto, jugó 25 frente al Cádiz y se quedó fuera de la convocatoria en el Metropolitano. Los goles de Lucas Pérez fueron clave la pasada temporada para los vitorianos —fue el máximo anotador con once dianas— pero esta campaña ha bajado sus registros a cuatro, tres de ellos de penalti, y perdido presencia.

Aprovechando este parón liguero, el Alavés jugó el pasado viernes un partidillo amistoso de 70 minutos ante el modesto San Ignacio de Tercera. Lucas Pérez participó del once inicial. Está por ver si Abelardo lo indulta ante el Celta o sigue en el dique seco.