Con el entrenador con contrato, igual que toda la plantilla actual salvo Sergio, falta por concretar la renovación por un sexto año del director deportivo
26 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Aunque tendrá que haber cambios necesariamente, el Celta tiene plantilla y entrenador para la próxima temporada. El único eslabón que queda pendiente es la continuidad por un sexto año de Felipe Miñambres como director deportivo, ya que el maragato acaba contrato el próximo mes de junio después de haber renovado por un año en el ejercicio anterior. Las luces y las sombras se mezclan en su lustro en el Celta y no parece claro del todo que vaya a repetir los siete años que Miguel Torrecilla estuvo en Vigo.
En la plantilla actual del Celta, y después de descartarse la opción de corte de Nolito al cumplir el número de partidos, el único que acaba contrato el 30 de junio es el portero Sergio Álvarez, que continúa recuperándose de su lesión. Un equipo armado en el que tendrá que intervenir Eduardo Coudet, que firmó por un año y medio (hasta junio del 2022) cuando llegó a Vigo en sustitución de Óscar García Junyent.
Lo único que no está claro es si Felipe Miñambres será el encargado de realizar las operaciones. Hasta la fecha, el astorgano ha ido renovando su continuidad avalado sobre todo por los resultados económicos, que no deportivos, con la elección de entrenadores como gran lunar (falta por ver el recorrido de Coudet).
El principal debe de esta temporada es no poder colocar a los jugadores con los que no contaba el club (Jorge Sáenz y David Costas) en ninguno de los dos mercados, y tampoco poder resolver la salida de Emre Mor, el fichaje más caro de la era Mouriño y que tras pedir una nueva oportunidad volvió quedarse a años luz de lo que todo el mundo esperaba del turcodanés. Tampoco suma la contratación y posterior gestión de la salida de Álvaro Vadillo al Espanyol sin haber disputado un solo minuto oficial en el Celta.
Por el contrario, el gran acierto fue la contratación de Renato Tapia, libre del Feyenoord y que se ha convertido en una de las sensaciones de la liga. La del peruano ha sido la mejor operación de mercado de la era Miñambres desde la contratación de Maxi Gómez directamente desde la liga uruguaya.
Otro aspecto a tener en cuenta de cara a la resolución final es la querencia el Celta por la continuidad en el cargo de director deportivo. Después del efímero paso de Ramón Martínez por la secretaría técnica, llegó Miguel Torrecilla desde Salamanca y estuvo siete años en Vigo siendo uno de los artífices de la vuelta a Primera y el regreso a Europa.
Fue en el ejercicio de la última Europa League cuando llegó Miñambres desde el Rayo Vallecano y desde entonces se mantiene en el cargo pese a que el rendimiento del equipo fue menguando hasta salvarse en dos ocasiones en la última jornada y más por deméritos de los rivales. Esta temporada, a falta de 10 jornadas, el escenario parece más tranquilo y la cúpula del Celta puede comenzar a pensar si busca el quinto director deportivo de la era Mouriño o si Miñambres tiene un sexto año en Vigo.
En la última de sus contadas comparecencias, el maragato tiró de su discurso habitual al ser preguntado por el tema: «Acabo contrato en junio, pero no me quita horas de sueño ni está en mi cabeza. Lo más importante es tratar de ir preparando el siguiente mercado, que el equipo mejore. Nosotros trabajamos como si fuéramos estar siempre, aunque luego no sea así». La campaña pasada renovó antes de la salvación.